Las estafas ganan peso en Catalunya y ya son son el delito más denunciado
Un significativo 17,6% de los residentes catalanes aseguran haber sido víctimas de al menos una estafa en el último año
La proliferación de las compras en línea y la generalización de la digitalización para pagos están contribuyendo a un aumento constante de fraudes y estafas. Estos hallazgos se desprenden de la Encuesta de Seguridad Pública de Catalunya de 2022 (ESPC), publicada por el Departamento de Interior de la Generalitat.
La relevancia de estos actos delictivos ha llegado a tal punto que las estafas ahora son la principal causa de denuncias entre los catalanes
Aproximadamente el 34% de todos los incidentes registrados se ubicaron en la categoría de engaños, fraudes y estafas. Además, la encuesta resalta que solo el 40% de las personas afectadas afirma haber recuperado, ya sea totalmente o parcialmente, el monto estafado.
De esta forma, los delitos mencionados ocupan la posición predominante en las denuncias de los participantes. Un significativo 17,6% de los residentes catalanes aseguran haber sido víctimas de al menos una estafa en el último año.
Este porcentaje representa un aumento notable en comparación con la encuesta de 2020, incrementándose en casi 4 puntos. En 2020, el 13,8% de los encuestados reportaron haber sido afectados por alguna estafa.
Más del 69% de estos delitos se llevaron a cabo en el espacio virtual. Únicamente el 14,6% correspondió a engaños perpetrados de manera presencial, mientras que una proporción similar, el 14,4%, se ejecutó a través de llamadas telefónicas.
TIPOS DE ESTAFA
El reporte divulgado por el Departamento de Interior de la Generalitat subraya que aproximadamente un tercio de los fraudes experimentados por los ciudadanos catalanes, específicamente el 32,2%, se traducen en cargos indebidos en sus tarjetas. Casi una tercera parte adicional, el 31,4%, está vinculada a engaños en la adquisición de productos o servicios.
En una posición menos destacada en términos de frecuencia, las falsificaciones o el uso indebido de datos personales representan el 9,5%, mientras que los fraudes derivados de virus en dispositivos electrónicos constituyen el 8,8%.
En el ámbito digital, el 6,3% de los fraudes están relacionados con el acceso no autorizado a computadoras o cuentas personales, y un 2,4% se atribuye a la divulgación de información sensible.
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