Merino abandona definitivamente la protesta frente a la sede de Defensa en Madrid, que inició el 22 de noviembre para reclamar que el ministerio le reconociera que su incapacidad deriva de lesiones producidas en acto de servicio.
El exsoldado de 40 años y padre de seis hijos tuvo que ser ingresado tras una semana haciendo huelga de hambre frente al Ministerio | Reclama que le reconozcan que su incapacidad deriva de lesiones producidas en acto de servicio.