La acusada prometió al ex futbolista de la Liga española invertir el dinero pero lo ingresó directamente en sus cuentas personales.
Los querellantes acusan al Arzobispo de Oviedo de "extralimitación de sus funciones y administración del patrimonio de la entidad a su antojo y con ánimo de lucro, así como otros actos de diversa consideración".
El empresario nacido en Melilla, J. B. B, ha sido condenado a siete años de prisión y 21,63 millones de multas por tres delitos fiscales.