La desaparición de las cabinas se producirá a nivel nacional de acuerdo con la Disposición Transitoria Novena del anteproyecto de Ley general de Telecomunicaciones.
El Gobierno no encuentra ningún operador que quiera hacerse cargo de este estos dos servicios universales. Tendrá que obligar a una compañía a encargarse de su gestión, ya que no puede quedar vacante.