Hasta el día 21 de mayo, fecha de las primarias, vamos a tener tiempo de ir hablando de los protagonistas de las mismas y de sus apéndices.
Dicen que el que tiene el poder se cree el ser más poderoso de su entorno y llega a perder hasta el sentido común. Solo la ceguera del que no quiere ver le convierte en vulnerable y un simple mosquito puede acabar con su vida introduciendo su pequeño aguijón en un brazo. No hay enemigos pequeños ni el poder es eterno, solo transitorio.
Les aseguro que hoy en Viladecans mucha gente decente ha llorado de alegría al ver entrar a la Guardia Civil. Son ciudadanos anónimos a los que se les ha tenido contra una pared durante años por no someterse a los criterios de un déspota.