Este lunes Barcelona se ha convertido, una edición más, en la sede del Mobile World Congress, un acontecimiento que muestra a la ciudad condal como escaparate de las nuevas tecnologías.
Después de que una treintena de empresas hayan decidido no asistir.
Ya son diez las tecnológicas que han anunciado que no asistirán al congreso por la amenaza del coronavirus.
Está claro que, a los países en los que están Amazon, Sony, Ericsson y LG, les conviene que Barcelona pierda potencia e imagen institucional porque si suena la flauta, alguno de ellos recogería el testigo del Mobile con indisimulada satisfacción.
El consejero delegado de GSMA -asociación que agrupa la industria móvil e impulsa el evento-, John Hoffman, ha admitido que la organización "estaba extremadamente nerviosa" por la crisis política en Cataluña.
El 3310 de Nokia salió al mercado hace 17 años y sigue ostentando el récord del móvil más vendido | La versión mejorada se presentará en el Mobile World Congress de Barcelona.