Calviño se juega este jueves la presidencia del Eurogrupo

Nadia Calviño se enfrenta este jueves a la votación del Eurogrupo. La candidata, que debe sustituir al portugués Mário Centeno, tiene mucha presión ya que debe ser capaz de convencer a espectros muy diversos dentro de los 27 de la UE. Los ministros de Economía y Finanzas de la zona euro (Eurogrupo) decidirán este jueves quién será su presidente o presidenta durante los próximos dos años y medio en una elección para la que se han postulado la vicepresidenta de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, y los ministros de Finanzas de Luxemburgo e Irlanda, Pierre Gramegna y Paschal Donohoe, respectivamente.

Parece que la elección va a ser muy ajustada, aunque todavía nada está claro porque los votos son secretos. De momento Calviño tiene algunos aliados asegurados, como Italia y Portugal. Además, tiene el apoyo público de Angela Merkel. Por su parte, Pierre Gramegna tiene el apoyo del Benelux y el irlandés Paschal Donohoe se asegura los votos de Austria, Chipre, Letonia, Eslovaquia y Eslovenia.

Desde Moncloa aseguran que Pedro Sánchez ha estado llamando a sus homólogos y son optimistas respecto al triunfo de Calviño. De hecho, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha declarado varias veces en los últimos días que es "razonablemente optimista" al respecto y ha destacado el trabajo "entre bambalinas" para conseguir apoyos para la vicepresidenta española.

Juegan en contra de Calviño la gran movilizaicón de sus rivales, especialmente del Partido Popular Europeo, que tiene los votos bastante atados, y los intereses de la llamada 'segunda agenda' que comparten otros ministros y puede llevarlos a votar a los otros candidatos. 

La 'segunda agenda' incluye todos los temas que no están en la principal agenda del Eurogrupo, como la reforma de la eurozona. Aunque no son temas primordiales, pueden llevar a posibles alianzas entre países que son difíciles de romper. 

La candidatura ganadora deberá conseguir el apoyo de al menos diez de los diecinueve participantes en una votación secreta en la que también participan los ministros candidatos. Si ninguno de los tres llega a esta cifra en una primera votación, se eliminará al que haya recibido menos votos y se organizará una nueva. 

Si nadie obtiene los diez votos tras la primera ronda del jueves, se informará a los candidatos de los votos que tienen para que decidan si quieren seguir o no. Así las cosas, parece que ninguno de los tres candidatos obtendrá los votos necesarios para ser elegido presidente del Eurogrupo en una primera votación. La clave estará, por tanto, en cuál de ellos es el que obtiene menos apoyos y se retira y en cómo se distribuya entonces el equilibrio de fuerzas. Parece que el primero que puede caer de la lista es Gramegna. En ese caso, los dos países de los que más dependerá la victoria de Calviño para la segunda ronda son Alemania y Grecia. Si ellos no votan a su favor, Calviño no tendrá apoyos suficientes. También es muy importante el voto de Francia. 

Votos asegurados

La española cuenta con el voto garantizado de Alemania, Italia y Portugal tras las confirmaciones públicas por parte de Angela Merkel, António Costa y Giuseppe Conte. En total, el Gobierno cree tener atados seis o siete votos aparte del propio, entre ellos también el de Grecia o el de Chipre, países con ministros del Partido Popular Europeo (PPE).

En las cuentas de Moncloa también se encuentra Francia a pesar de que el Gobierno de Emmanuel Macron no ha hecho público su apoyo a Calviño. Fuentes del ministerio de Finanzas galo han señalado a Europa Press que la decisión no está tomada todavía.

Sea quien sea la persona elegida, tendrá en sus manos la dirección del Eurogrupo en un momento de enorme incertidumbre debido al impacto de la pandemia de Covid-19 sobre las economías europeas, que sufrirán a cierre de este año una dura recesión como consecuencia de las medidas de confinamiento.