Expertos proponen una jubilación flexible a elegir entre los 60 y los 75 años

Una de las decisiones más importantes que el Gobierno debe adoptar en los próximos meses es la que hace referencia al sistema de pensiones y jubilaciones de los trabajadores. Y, en este aspecto, la edad de jubilación ha adquirido una gran importancia debido a la situación de las arcas públicas.

Por ello, desde el Gobierno se pretende retrasar la edad de jubilación para impedir que el sistema de pensiones entre en una situación muy delicada. El aumento de la esperanza de vidas es uno de los factores que ha obligado a distintos gobiernos a retrasar la edad de jubilación, una situación que se pretende instaurar en España reformando la actual legislación.

Un grupo de expertos la elaborado un estudio en el que ha llegado a la conclusión de que se debe establecer un sistema de jubilación más flexible que permite al trabajador elegir la edad en la que pasa al estado de pensionista.

Según este análisis, una trabajador debería poder elegir la edad de jubilación en la franja de entre los 60 y los 75 años, aunque, evidentemente, escoger seguir trabajando durante más años o no tendrìa consecuencias.

En primer lugar, los expertos del think tank Civismo que han elaborado este informe consideran que prorrogar la edad de jubilación permitirá a los trabajadores aumentar su pensión y al sistema ahorrarse una buena cantidad de dinero y contribuiría a equilibrar las cuentas.

En el caso hipotético que se plantea en el estudio, un trabajador que opte por jubilarse a los 60 años después de haber cotizado 35, sufrirá un doble recorte: primero, por no llegar a los 45 años cotizados; y, segundo, se le aplicaría un factor de sostenibilidad por optar por jubilarse a los 60. De esta forma, su pensiòn se vería sensiblemente recortada.

Por contra, si un trabajador opta por jubilarse más allá de los 70, recibirá una triple compensación: por haber cotizado más años, por la aplicación del factor de sostenibilidad, en el que se tiene en cuenta la esperanza de vida y, por tanto, los años durante los que recibirá una pensión del estado, y, en tercer lugar, porque su base de cotización resultará más elevada y eso permitirá aumentar el valor de su pensión.

Por lo tanto, estará en manos del propio trabajador elegir alargar su vida laboral y percibir una pensión mayor o jubilarse a una edad más temprana a cambio de recibir una pensión muy inferior.

La intención del Gobierno actual es acercar la edad de jubilación real a la legal, que actualmente es a los 65 años y 10 meses. Tras la reforma de 2011, en 2027 la edad de jubilación se situará  en los 67 años, excepto para los trabajadores que hayan cotizado 38 años que permanecerá en los 65.