La FIFA no habla de las posibles sanciones a Real Madrid y Atlético de Madrid

La FIFA ha eludido hacer cualquier comentario sobre cualquier procedimiento al Real Madrid y al Atlético de Madrid, por supuestas infracciones en la inscripción de jugadores extranjeros menores de edad, y una posible sanción similar a la impuesta al Fútbol Club Barcelona. "No podemos hacer comentarios sobre cualquier procedimiento abierto. No podemos dar más información de momento", señaló a EFE un portavoz de la FIFA.

Las mismas fuentes de FIFA aludieron a las manifestaciones hechas a finales de enero cuando este organismo admitió "estar conduciendo una investigación preliminar en orden a recopilar información relevante y documentación". "No podemos hacer más comentarios en esta fase", señaló también entonces el organismo que preside Joseph Blatter.

Después de que algunos medios españoles informaran el martes por la noche de una posible sanción de la FIFA al Atlético de Madrid y al Real Madrid, que les impediría fichar en los dos próximos periodos de fichajes por incumplir el Reglamento y Estatuto de Transferencia de Jugadores menores de edad, el conjunto madridista rechazó este supuesto. El club aseguró que "siempre ha cumplido escrupulosamente la normativa FIFA al respecto" y cuestionó la publicación de dichas informaciones, "malintencionadas" en algunos casos, con la intención de "implicar al club en supuestas infracciones que en ningún caso se han cometido". "Sorprende que determinados medios de comunicación insistan en relacionar las últimas contrataciones realizadas con una hipotética sanción, pues no tiene nada que ver la contratación de jugadores con su inscripción posterior, que es lo que prohibiría la FIFA", señaló el Real Madrid en un comunicado.

Desde el pasado 1 de marzo la FIFA reforzó su normativa para la protección de menores tras la sanción impuesta al Fútbol Club Barcelona, que le impide hacer fichajes durante dos periodos (hasta enero de 2016) por vulnerar la normativa en materia de fichaje de menores de edad. La sanción, ratificada por el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) y acompañada de una multa de 370.000 euros, se decidió después de que la Comisión de Disciplina de la FIFA detectara irregularidades en 9 de los 37 casos investigados, por incumplimiento en el Reglamento sobre el Estatuto de Transferencia de jugadores.