Ni dilaciones, ni precipitaciones, ni imposiciones

El acuerdo alcanzado por el presidente Mas con ERC la semana pasada supone garantizar la estabilidad parlamentaria por lo que resta de la legislatura, lo que permitirá seguir adelante con el proceso nacional, con las elecciones que tendremos que hacer en el Parlamento de Cataluña el 27 de septiembre, y aprobar las iniciativas legislativas previstas para seguir cumpliendo con el otro gran compromiso electoral de Unión y de CiU con todos los catalanes: mantener la lucha para vencer definitivamente la crisis con medidas de claro carácter social y económico.

El acuerdo alcanzado por el presidente Mas con ERC la semana pasada supone garantizar la estabilidad parlamentaria por lo que resta de la legislatura, lo que permitirá seguir adelante con el proceso nacional, con las elecciones que tendremos que hacer en el Parlamento de Cataluña el 27 de septiembre, y aprobar las iniciativas legislativas previstas para seguir cumpliendo con el otro gran compromiso electoral de Unión y de CiU con todos los catalanes: mantener la lucha para vencer definitivamente la crisis con medidas de claro carácter social y económico.

En principio, este acuerdo permite a la vez poder aprobar los presupuestos, la reforma del SOC y la de la Formación Profesional y afianzar nuestra apuesta por la economía productiva como mejor herramienta para generar riqueza y empleo. Como partido lo que nos debe ocupar son los próximos compromisos electorales: primero, las municipales del 24 mayo y después, las del Parlamento del 27 de septiembre. Cada cosa a su tiempo. Hay que ir paso a paso. Nunca ha sido una buena solución poner el carro delante de los toros: por eso tenemos que aprovechar el tiempo y tomar decisiones cuando corresponda de manera ordenada, sin dilaciones, sin precipitaciones y sin imposiciones.

Ahora hay que poner la mirada en esta doble cita electoral sin mezclar conceptos porque ambas son lo suficientemente importantes como para hacer las cosas bien, con sentido común. En ambos casos queremos hacerlo con nuestros socios de federación, con CDC, para plantear las municipales, pero también para las elecciones al Parlamento, en las que tendremos que estudiar el contenido programático y el formato de la candidatura. Hay que trabajarlos con serenidad, ya que ni la precipitación ni dilación son buenas consejeras.

Hay que trabajar sin prisa, pero sin pausas y al mismo tiempo comprometidos con ir avanzando paso a paso hasta donde sea posible, de acuerdo con nuestros estatutos y con nuestros principios fundacionales. Que quede claro también que en este proceso no aceptaremos imposiciones ni presiones de nadie, mucho menos si vienen de fuera. Sabemos que construimos el futuro y lo haremos desde la responsabilidad, el compromiso y la ilusión.