Las altas temperaturas en verano pueden provocar intoxicaciones alimentarias 

Las intoxicaciones alimentarias son más frecuentes en verano y también suelen ser más graves, pues una de las principales complicaciones es la deshidratación. Los datos oficiales hablan de una mayor incidencia de las intoxicaciones por consumo de alimentos en el hogar que fuera de él, pues se relajan las costumbres y las altas temperaturas favorecen el crecimiento de microorganismos en los alimentos.

Para ello, la OCU recomienda evitar que las bacterias peligrosas lleguen a nuestros alimentos pero, sobre todo, que se multipliquen. "Una bacteria por sí sola no es peligrosa, pero muchas sí. La temperatura alta y el tiempo juegan en contra, convirtiendo la comida o los restos de ella en el caldo de cultivo ideal para que proliferen los microorganismos", aseguran mediante comunicado de prensa.

Para ello, ofrecen 10 principios de seguridad:

1. Extremar la higiene personal. Lavarse cuidadosamente las manos y siempre antes de manipular alimentos.
2. Después de cocinar, refrigerar la comida cuanto antes, no dejarla a temperatura ambiente, ya que es la más peligrosa.
3. Si sales al campo o la playa, lleva la comida en recipientes muy limpios y herméticamente cerrados. Mantén fresca la nevera o cesta con la comida, con acumuladores o una bolsa de hielos, o refrigera con agua del mar o río.
4. Las sobras de comida, a la nevera? o a la basura. Si lleva tiempo fuera, se prolonga la sobremesa con los restos encima de la mesa, etc. No podrás volver a comerlos.
5. Dejar los alimentos tapados y bien protegidos, con tapas, cubiertas de redecilla o un paño.
6. Evitar la contaminación cruzada: tablas, platos o cubiertos usados en alimentos crudos, no utilizar otra vez con los cocinado sin haberlos lavado. Usar cubiertos limpios al servir las salsas o ensaladas o guisos.
7. Recalentar solo la porción que se vaya a consumir.
8. En la compra, dejar para el final los alimentos que necesitan refrigeración.
9. Tener especial cuidado con los productos con salsas, con mayonesas, con los asados y con las preparaciones que incluyen alimentos cocinados y crudos a la vez.
10. Beber siemrpe que sea posible agua embotellada y sin hielo.

Ante una intoxicación, la clave es la rehidratación. Tomar suero comprado o un preparado alcalino casero (con un litro de agua, una cucharadita de sal, una cucharadita de bicarbonato sódico, dos cucharadas de azúcar y el zumo de un limón ).