La investigación apunta ahora a un tercer implicado en el caso Asunta

Los investigadores habían creído hasta ahora que el asesinato de la niña de 12 años fue presuntamente planeado y ejecutado solo por sus padres adoptivos, pero ahora están convencidos de que hubo una tercera persona que ayudó a Rosario Porto y a Alfonso Basterra.

Ponerle cara es lo que centra ahora el trabajo de la Guardia Civil. Lo que tienen más claro es qué papel jugó esta persona. Creen que su parte del plan fue depositar el cadáver en la pista forestal de Cacheiras (Teo) en la que dos hombres la encontraron a la 1.15 horas del domingo 22 de septiembre.

La existencia de un tercer implicado explicaría la parte de los hechos relacionados con el crimen que estaba oscura: quién depositó el cuerpo y a qué hora.

Rosario Porto y Alfonso Basterra interpusieron la denuncia por la desaparición de su hija a las 22.31 horas del sábado 21. Los investigadores no creen imposible que hubiesen ido después a dejar el cadáver, pero ven poco probable que tomasen tantos riesgos. ¿Lo hicieron antes? Todo apunta a que no, porque la pista forestal es bastante transitada y nadie vio nada hasta la 1.15 horas del domingo.

No mucho antes, a las 0.30 horas, un vecino que reside muy cerca asegura que pasó por ese lugar y no vio nada. También afirma que esa misma noche, antes, transitó por el camino otras dos veces y que allí tampoco llegó a ver el cuerpo de Asunta.

Entonces, o el cuerpo fue depositado antes de las 22.30 horas y el vecino no lo vio ninguna de las veces que pasó, o el cadáver se dejó allí entre las 0.30 horas, última vez que pasó el vecino, y la 1.15 horas del día 22, cuando fue hallado.

A los investigadores no les cuadra que Rosario Porto y Alfonso Basterra, ya fuese juntos o solo uno de ellos, corriesen el riesgo de depositar el cuerpo en la pista después de las 0.30 horas, cuando ya habían denunciado su desaparición y podrían estar ya vigilados. Tampoco que lo hiciesen antes de las 22.31 horas, porque el cadáver habría sido encontrado mucho antes. Por eso creen que contaron con la ayuda de la tercera persona que podría haber depositado el cuerpo después de las 0.30 horas. También podría haberlo hecho antes y que el vecino no lo hubiese visto, pero siempre después de las 22.30 horas, cuando Porto y Basterra acudieron a la comisaría.