Tengamos cuidado

No entiendo por qué el Conseller Espadaler pidió a su homologo el Ministro Fernández Diaz que le parara a los ultras camino de Barcelona, y luego en la mismísmas calle de Sants permitió que los mossos no hubieran previsto que grupos de independentistas violentos insultaran a tan peligrosos viajeros

No entiendo por qué el Conseller Espadaler pidió a su homologo el Ministro Fernández Diaz que le parara a los ultras camino de Barcelona, y luego en la mismísmas calle de Sants permitió que los mossos no hubieran previsto que grupos de independentistas violentos insultaran a tan peligrosos viajeros provocando una trifulca que, si no acabó en tragedia, fue porque los recién llegados no portaban esta vez "las armas" que muchos esperábamos que llevaran encima? y que suelen enseñar si ellos consideran "que se les provoca", algo que no es nada difícil..

Pero como escribió Cervantes describiendo al valentón de turno: Y luego, incontinente/caló el chapeo, requirió la espada/miró al soslayo, fuese, y no hubo nada, asi transcurrió la temida jornada de los ultraderechistas que ocuparon una parte casi imperceptible de la ciudad que, eso si, tuvo que soportar sus gritos. En cambio, los otros, los que estaban ya aquí, y eran fácilmente previsibles en un 12 de Octubre, se entretuvieron luego insultando y grediendo a jóvenes socialistas porque "al parecer" nadie pudo evitarlo.

¿Qué tiene que pasar para que los mossos, y sobre todo, sus Jefes, se enteren que eso no es de recibo en una sociedad democrática y menos en los tiempos en los que nos toca vivir?. ¿Con ese ambiente de amenaza se quiere convocar una consulta popular? ¿A quién quieren hacer sentir miedo esos descerebrados y quienes los dirigen?, ¿a los ciudadanos que no piensan como ellos?.

Ser policía es muy difícil. Esta misma mañana, recibía por correo electrónico unas fotos en las que se podía comprobar fácilmente el lamentable estado en el que trabajan muchos de nuestros mossos en organismo públicos Se me calló, una vez más, la cara de vergüenza que después de tantos años esperando el nacimiento de una policía democrática vivan sus componentes situaciones como ésta.

Tenemos que reaccionar, y por lo que parece, pedirle a nuestros políticos que asuman las responsabilidades para las que fueron elegidos, porque si no lo hacen, cualquier día puede ocurrir una desgracia, como ya pasó en la famosa Transición, acontecimiento que, como siempre, solo pagarían, manifestantes y policías. O sea, los más pobres en el escalón social.

Manuel Fernando González

Editor y Director

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