Llega al juzgado de Ponteareas para declarar el guardia civil que disparó al batería de Los Piratas

El agente de la Guardia Civil que disparó a Javier Fernández, que fue batería de Los Piratas, el pasado 26 de agosto, ha llegado a los juzgados de Ponteareas (Pontevedra) para declarar ante la jueza de Instrucción Número 2 en calidad de imputado por un supuesto delito de homicidio imprudente.

El agente ha llegado al edificio judicial sobre las 9,25 horas, acompañado de abogados y de otros miembros del Instituto Armado, y no ha hecho declaraciones a los numerosos periodistas congregados a las puertas del juzgado.

Por su parte, el abogado de la viuda, Gerardo Gayoso, ha expresado su esperanza en que la declaración del agente este viernes "aporte claridad" sobre lo ocurrido ese 26 de agosto en la vivienda familiar del músico, y si tuvo "necesidad" de usar su arma contra Javier Fernández.

Sobre el tratamiento médico que seguía el fallecido, diagnosticado de trastorno bipolar, Gayoso ha precisado que la familia no tenía claro si se le había retirado o solo reducido la medicación --pese a que al principio sostenían que se le había suspendido el tratamiento--.

"MÁS NERVIOSO"

El letrado ha apuntado, no obstante, que "es un hecho incontrovertible" que Fernández tenía un trastorno bipolar, y su viuda había advertido al psiquiatra que lo trataba que el músico estaba "más nervioso" desde que había nacido su hijo. En todo caso, la familia ha pedido el historial clínico del fallecido, que se aportará a la causa.

Gayoso también ha matizado sus afirmaciones sobre las diligencias solicitadas por la Fiscalía, después de que el Ministerio Público hubiese negado haber pedido informes psiquiátricos o psicológicos del guardia imputado. Según el abogado, lo que se han solicitado informes de "evaluación personal" y posibles anotaciones internas en su hoja de servicio.