Las empresas con más mujeres en puestos directivos son más eficientes

Este miércoles nos enterábamos a través del 'IV informe de las mujeres en los Consejos del Ibex-35', que solo el 2 de cada 10 puestos en Consejos de Administración de empresas del Ibex-35 lo ocupan mujeres. Un porcentaje que se ha incrementado nada menos que un 13,75% respecto a la cifra de 2015, pero que sigue estando por debajo del 21,2% de media de las empresas de los selectivos de países de la UE y de las recomendaciones de la CNMV (30%) y de la propia UE (40%).

Según el estudio 'Is Gender Diversity Profitable?', la presencia de un mayor número de mujeres en puestos directivos puede conllevar un aumento significativo de la rentabilidad de la empresa. El informe ha sido elaborado conjuntamente por el Peterson Institute for International Economics y EY a partir de una encuesta realizada en 2014 entre aproximadamente 21.980 empresas de 91 países.

El estudio pone de manifiesto que una empresa rentable con un 30% de mujeres en puestos de alta dirección puede aumentar hasta un punto porcentual su margen neto en comparación con otra de iguales características que carezca de presencia femenina.

En el caso de valorar el impacto en el conjunto de la muestra (empresas rentables y no rentables), el estudio señala que la empresa con más mujeres podría incrementar seis puntos su beneficio neto. Sin embargo, pese a la confirmación de los datos, el 60% de las compañías participantes (13.017) no cuenta con mujeres en los consejos de administración, alrededor del 50% no tiene presencia femenina en puestos ejecutivos y sólo 945 empresas (menos del 5% de la muestra) tienen a una mujer en el puesto de CEO.

ESPAÑA, POR DEBAJO DE LA MEDIA

Los resultados de la encuesta revelan una variación considerable en la representación femenina en las distintas regiones y países, así como en los diferentes sectores de la economía. A nivel europeo, sólo Noruega e Islandia han aplicado su cuota eficazmente. Los dos países tienen la más alta representación de mujeres en los consejos de administración, con un 40 y 51%, respectivamente. Destacan también Italia, Finlandia y Francia con una representación femenina en los consejos del 24%, 23% y 19%, respectivamente, y con cuotas fijadas del 33%, 40% y 20% en cada caso.

En el caso de España, la cuota de representación establecida es del 40% y, según los datos del estudio, de las 96 empresas locales que han participado sólo el 14% tiene presencia femenina en los consejos de administración, el 13% cuenta con mujeres en puestos ejecutivos y apenas el 3% tiene a una mujer desempeñando el rol de CEO.

Por sectores, el financiero, sanitario, de servicios públicos y telecomunicaciones presentan los mayores porcentajes de mujeres en cargos ejecutivos, que oscilan entre el 16-18% en puestos ejecutivos y el 12-14% en puestos de dirección. Por su parte, las áreas de actividad relacionadas con las materias primas, la tecnología, la energía y los servicios industriales presentan una representación femenina menor, con un 10%-12% y un 8%-10%, respectivamente.

"España debe convertirse en un referente en el mundo de la diversidad. Es necesario que nuestras empresas tomen conciencia de ello y fomenten ambientes de trabajo inclusivos en los que los hombres y las mujeres tengan exactamente las mismas oportunidades para acceder a puestos de liderazgo", concluye Maite Ballester, Senior Advisor de EY y Presidenta de la Fundación EY, institución que fomenta el emprendimiento y a la mujer como emprendedora.

TECHO DE CRISTAL Y TECHO DE CEMENTO

En la presentación del 'IV informe de las mujeres en los Consejos del Ibex-35' del miércoles, Nuria Cinchilla, profesora del IESE y directora del International Center for Work and Family (ICWF), destacó que "hay pocas mujeres que lleguen a los comités ejecutivos". "Hay un techo de cristal que lo pone la propia empresa y que no son solamente las estructuras, a veces muy rígidas, sino también los horarios, que son muy extensos y muy típicos españoles. Es algo que no ocurre en ningún lugar de Europa".

Junto con los horarios y las "estructuras rígidas" de las empresas, señala como la "gran causa de la discriminación" hacia las mujeres la maternidad "actual o potencial", por lo que insiste en la necesidad de que las empresas apuesten por horarios y trayectorias profesionales flexibles.

Además, advierte de la existencia un cierto "techo de cemento" que, según ha asegurado, "se autoimponen las mujeres" a sí mismas a la hora de competir con otros. "Eso lleva a que cuando sale un puesto de trabajo y se piden cuatro competencias la mujer no se presenta porque solo tiene tres y el hombre que tiene dos se presenta. Esto es algo comprobado sociológicamente", ha explicado.

En esta categoríadestaca también a las mujeres que "piensan que la conciliación es imposible". "A veces es verdad pero a veces no lo es y es simplemente que no hemos pensado alternativas factibles a las que lo hay que darles cauce".

CONCILIACIÓN

Cuando se habla de conciliación, "hay que dejar de hablar de conciliación de las mujeres" y hablar también de conciliación de los hombres. Por ello, aboga, en primer lugar, por llevar a cabo un impulso a la racionalización de los horarios que comience por ajustar el uso horario español y "terminar con los horarios de trabajo de nueve a nueve", así como ampliar el derecho al permiso de paternidad.

Sin embargo, ha insistido también en que los ajustes han de ir acompañados de políticas de apoyo y reglamentos para "ayudar a las empresas que lo hacen bien" porque, sino, la discriminación pasará a ser hacia los que tienen familia frente a los que no.

"¿Qué pasará cuando hombres y mujeres tengan los mismos derechos como padre y madre? Lo que va a pasar es que va a haber discriminación de maternidad y paternidad frente a los que no lo son", ha advertido.