Denuncian a la abogada de Manos Limpias por cobrar en negro y tener una cuenta en Panamá

Al sindicato Manos Limpias se le están poniendo las cosas difíciles estos últimos días. Hace una semana su secretario general Miguel Bernard fue detenido acusado de extorsión, junto al presidente de Ausbanc, Luis Pineda Salido.

Ambos ingresaron en prisión este lunes. La abogada del sindicato, Virginia López Negrete, que también es su directora jurídica, ha querido desmarcarse de las acusaciones de organización criminal diciendo que ella ignoraba todo esto.

El abogado Diego Torres solicitó el miércoles que Manos Limpias fuese expulsado como acusación popular contra la Infanta Cristina en el juicio del ‘Caso Nóos’, aunque al día siguiente el tribunal desestimó esta petición.

Este viernes el diario Público ha publicado que la Agencia Tributaria recibió una ampliación de una denuncia de un cliente de López Negrete y su socio, Juan Gonzalo Ospina, en la que aportaba datos sobre la cuenta que ésta tiene en Panamá.

López Negrete tendría una cuenta en el Panama Branch HSBC BANK donde se ingresaría los pagos de la empresa española López Negrete y Ospina S.A. Esta sociedad es un paraguas de las diferentes sucursales que estos letrados tienen en Miami o Panamá.

La denuncia también indica que el denunciante tiene constancia de que la letrada cobró a una fundación de Soria 8.000 euros sin factura. A principios de este años el Colegio de Abogados de Madrid recibió la denuncia de una persona que acusaba a la abogada de haber cobrado 8.470 euros sin aportar justificantes de pago.

LÓPEZ NEGRETE LO NIEGA

Por su parte, la abogada de Manos Limpias ha negado este viernes en Palma que ella, su socio o su despacho tengan una cuenta en Panamá. "No la tenemos ni en Panamá ni en Miami ni en ningún sitio", ha aseverado la letrada.

Ante los medios de comunicación congregados en las puertas de la sede de la Escola Balear d'Administració Pública (EBAP), donde se está celebrando el juicio por el caso Nóos, Negrete ha señalado que estas acusaciones forman parte de "una campaña de desprestigio" para atacar su imagen y honor.