COLAU, UN AÑO DE GESTIÓN MUY POBRE...

Ha pasado un año de las elecciones municipales, con importantes cambios en la composición de los consistorios; la irrupción en el municipalismo de nuevas fuerzas políticas surgidas de los movimientos sociales que se revelaron contra los que algunos llamaban “la casta”, es decir los partidos tradicionales, que no estaban cumpliendo con las aspiraciones de la ciudadanía.

Grandes ciudades como Madrid y Barcelona fueron las urbes abanderadas de ese cambio. Dos mujeres, una con experiencia en la judicatura gobierna en Madrid y otra surgida de los movimientos anti desahucios, en Barcelona. Sin la mayoría necesaria para gobernar solas y con la necesidad de pactos. Carmena con pactos más estables y Colau haciendo malabarismos para seguir adelante…

Días antes de cumplirse el primer aniversario de gobierno, Colau firma un acuerdo con uno de los partidos llamados de la “casta”, el PSC, pero sus votos no serán suficiente para sacar adelante las propuestas. Va a necesitar más apoyos. ¿De quién? Eso esta por ver.

Si hacemos balance de esos 365 días de gobierno, la verdad es que es muy pobre. Barcelona ciudad, que siempre ha sido motor de una Catalunya que ahora se encuentra en una grave crisis de todo, no ha visto los cambios que esperaba la ciudadanía y que tanta ilusión había despertado en los sectores más desfavorecidos…

Las grandes obras de la alcaldesa han sido: quitar el busto del rey en el ayuntamiento; cambiar los nombres de las calles; meterse en el fregado de “paralizar las licencias de hoteles, sin un estudio previo”; el conflicto con el sector de hostelería por el tema de las terrazas. Además, problemas con el tema del agua en el Área Metropolitana. Graves diferencias con los comerciantes por el tema de los manteros. Problema con los materos por no saber solucionar el tema. Diferencias y malestar con su guardia urbana por múltiples temas. Ser la alcaldesa de solo una parte de los barceloneses. Y el más reciente logro, los graves incidentes del barrio de Gracia, que no ha sabido gestionar. Eso sin olvidarse que el tema de los desahucios sigue sin haberse solucionando y que algunos de los grandes salones han estado a punto de marcharse de Barcelona por su actitud. Huelgas del metro y autobuses, etc.

¿Cómo es posible que esto haya sucedido? Varios son los motivos: la falta de experiencia y el personal tanto político como técnico del que se ha rodeado Colau. ¿Nadie le había explicado que no es lo mismo gobernar que estar en la oposición? Pues es lo primero que deberían aprender quienes formen parte de un gobierno y lo segundo, que se debe gobernar pensando en todos, no solo en los que le han votado. Los compañeros de recorrido han de ser gente con preparación, sentido común y nada “sectarios”. Todo lo contrario de lo que ella tiene en su equipo. Los técnicos y asesores, dejan mucho que desear y algunos de ellos con intereses ocultos, nada claros y que evidentemente la conducen a errores de bulto, demasiados…

Los concejales no están asumiendo sus responsabilidades de mala o nula gestión y eso le pasa factura directa a Colau que está asumiendo directamente ella. ¿Dónde están los concejales para salvarle la cara? Demasiados fallos. Que cada palo aguante su vela, y el que no sirva, que se vaya a su casa…

Cuidado con el clan “argentino” diverso, desde peronistas a filosocialistas que tienen secuestrada a la propia alcaldesa excesivamente influenciada por ellos y su filosofía barata y partidista. Solo se mojan por ellos mismos…..

La ciudadanía se pregunta dónde están los grandes proyectos de ciudad cosmopolíta. ¿Dónde está la Barcelona social?

Hace un año que Barcelona En Comú gobierna, y el cambio, hoy por hoy, es a peor. Si Colau no cambia de estrategia, otros 365 días pueden ser demasiados para la ciudad ya que la Barcelona Cosmopolita se va a convertir en la Barcelona antisistema, sin control y con escándalos día sí y día también. Barcelona y su ciudadanía se merecen otros gobernantes.

¿”Obras son amores y no buenas razones"?