Más árboles y menos emisiones para frenar el CO2 en la Unión Europea

El pleno de la Eurocámara ha aprobado este miércoles 13 de septiembre -por 532 votos a favor, 144 en contra y 20 abstenciones-- las nuevas normas comunitarias para impulsar el papel de los bosques en la absorción de CO2 y ha reclamado que la tasa de absorción de CO2 en los Veintiocho supere las emisiones en 2030, en línea con los compromisos del Acuerdo de París.

La propuesta legislativa, que todavía debe ser negociada con los Veintiocho y forma parte del paquete climático presentado por la Comisión en julio de 2016, plantea así integrar y equilibrar las emisiones y la absorción por el uso de la tierra, el cambio de uso de la tierra y la silvicultura en las actuaciones para atajar el cambio climático hasta 2030.

Los bosques de la UE absorben el equivalente a casi el 10% del total de emisiones de gases de efecto invernadero del bloque comunitario.

Por lo que se refiere a los créditos por la reducción de CO2, las nuevas reglas estipulan que si la absorción de CO2 es superior a las emisiones por el uso de la tierra durante los primeros cinco años, los Gobiernos podrán acumular esos créditos y usarlos más adelante, para lograr alcanzar sus objetivos en el siguiente periodo de cinco años.

Los Gobiernos europeos también podrán utilizar esos créditos para cumplir sus objetivos para reducir sus emisiones.

Los Veintiocho deberán informar de sus emisiones cada año para cumplir el objetivo de equilibrar las emisiones y la absorción en dos periodos consecutivos de cinco años cada uno (2021-2025 y 2026-2030) y si no alcanzan el objetivo en ninguno de ellos, el déficit se descontará de su asignación en el marco del reglamento sobre reducción de emisiones.

El límite al uso de créditos por gestión forestal aumentará del 3,5% que planteaba la Comisión Europea al 7% para permitir contabilizar créditos adicionales al incluirse los productos madereros aprovechados, como el material de construcción y el mobiliario, en la contabilidad, algo incentivará a los países a desarrollar el uso de la madera aprovechada para fines distintos al energético.

Los umbrales para cada Estado miembro se establecerán sobre la base de su "nivel de referencia forestal" -una estimación de la media anual de emisiones o absorciones netas derivadas de las tierras forestales gestionadas en el territorio del país. 

Los eurodiputados piden que se basen en las prácticas entre el año 2000 y el año 2012, en lugar del plazo más largo propuesto por la Comisión (1990-2009).

Además, las emisiones que las autoridades nacionales no pueden controlar, como por ejemplo las producidas por fuegos, podrán excluirse pero dentro de límites para no crear vacíos legales.