Tras analizar a 1.000 personas, los investigadores comprobaron la combinación de estatinas y la dieta mediterránea aporta más beneficios a la hora de reducir la mortalidad en estos pacientes que cuando se consumen de forma separada.
Además, el estudio también ha hallado que sólo el 47 por ciento de los que toman medicación contra la hipertensión alcanza el objetivo de presión arterial de menos de 140/90 mmHg (milímetros de mercurio).