Este equipo, al que no entrena un entrenador que no huele a colonia cara como Guardiola, pero que arenga a los suyos como nadie en los descansos, y que está integrado por jugadores que los ficha cada año un genio llamado Monchi, que luego los revende al año siguiente, a precio de platino, es con todos los derechos un grande entre los grandes equipos del mundo del fútbol.
El Athletic Club obtuvo un sufrido triunfo en el campo del Augsburgo alemán (2-3), gracias a un doblete de Aritz Aduriz en las postrimerías del partido, en una victoria que certifica el pase del equipo de Ernesto Valverde a la siguiente ronda de la Europa League como primer clasificado del grupo L.