La Policía entra en un entierro para desbloquear un teléfono con el dedo del muerto

Policías de la ciudad de Largo, en el estado de Florida, entraron en el entierro de un hombre y usaron el dedo del fallecido para desbloquear su teléfono.

No consiguieron desbloquear el aparato y están recibiendo críticas por su actitud inapropiada.

Los agentes llegaron al cementerio de la ciudad de Clearwater, donde se estaba celebrando el funeral de Linus Phillip. El hombre murió a causa de varios tiros recibidos por la policía después de negarse a salir de su coche cuando se encontraba en una gasolinera. 

La policía justifica que el hombre es sospechoso de tráfico de droga y que no cumplió con la orden policial. 

Los agentes han justificado la invasión del sepelio y a extraña actitud por creer que los datos que el hombre tenía en el teléfono podrían ayudar a aclarar la investigación.

Además, la policía local sospecha de que la víctima podría tener información sobre otros casos relacionados con el tráfico de drogas en la zona.

A pesar de los intentos, los policías no fueron capaces de desbloquear el aparato. 

La novia de Linus, Victoria Armstrong, en declaraciones al periódico 'Tampa Bay Times', ha dicho que la actitud de los policías "es una auténtica falta de respeto". 

Los representantes de las fuerzas policiales han argumentado que nunca pensaron pedir autorización para entrar en el funeral, ya que las personas muertas no "tienen derecho a la privacidad".

El abogado de la víctima ha presentado una queja contra la policía.