La senadora opositora Jeanine Áñez se proclama presidenta interina de Bolivia

La senadora opositora Jeanine Áñez asumió el martes la presidencia interina de Bolivia, tras la renuncia de Evo Morales.

Al momento del anuncio, según Associated Press, no había representantes del partido de Evo Morales, el Movimiento por el Socialismo.

La sesión extraordinaria de la Asamblea Legislativa fue programada el lunes por Jeanine Añez, quien también es la segunda vicepresidenta del Senado boliviano, para analizar la renuncia de Evo Morales como Presidente de la República.

Jeanine Añez pidió el derecho de asumir el liderazgo interino del estado hasta que se celebren nuevas elecciones, dadas las renuncias del vicepresidente de la República y de los presidentes y vicepresidentes del Senado y de la Cámara de Diputados.

Abogado y opositor de Morales, Añez, de 52 años, fue director de la estación de televisión Totalvision y desde 2010 representa a la región del Beni en la Asamblea General.

MORALES DICE QUE LA AUTOPROCLAMACIÓN VIOLA LA CONSTITUCIÓN

Evo Morales, que renunció el domingo después de casi 14 años en el poder, reaccionó a la autoproclamación de Áñez considerándola un "golpe de Estado".

"El golpe más astuto y espantoso de la historia sucedió. Una senadora derechista se proclama presidenta del Senado y luego presidenta interina de Bolivia sin quórum legislativo, rodeada de un grupo de cómplices y liderada por las Fuerzas Armadas y la policía, que reprimen al pueblo", escribió Evo Morales en la red social Twitter tras su llegada a México, que le concedió asilo político.

Morales dijo que la ley viola la constitución política del estado, así como las reglas internas de la Asamblea Legislativa.

"Denuncio ante la comunidad internacional que el autoproclamado acto de un senador como presidente viola el CPE de Bolivia y las normas internas de la Asamblea Legislativa. El golpe debe llevarse a cabo con la sangre de los hermanos asesinados por la policía y las fuerzas militares utilizadas para el golpe", añadió.

EJÉRCITO FUERZA LA CAÍDA DE MORALES

Morales renunció después de que los jefes de las fuerzas armadas y de la policía boliviana le pidieran que dimitiera para que la estabilidad y la paz pudieran regresar al país.

El lunes, la Asamblea Legislativa boliviana recibió una carta de renuncia de Evo Morales, en la que dijo que esperaba que su gesto evitara más violencia y permitiera la "paz social" en el país que gobernó durante 13 años.

Evo Morales llegó a México el martes, el país que le dio asilo político. "Mientras esté vivo, continuaré en la política. La lucha continúa. Todos en el mundo tienen derecho a liberarse de la discriminación y la humillación", prometió en el aeropuerto de la Ciudad de México.

Morales agradeció al Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, por los periodistas. "El gobierno mexicano me salvó la vida", dijo.

Bolivia ha sufrido una grave crisis desde que Evo Morales fue proclamado presidente por cuarto mandato consecutivo en las elecciones del 20 de octubre, cuando la oposición y los movimientos de la sociedad civil afirman que hubo fraude electoral.

LAS PROTESTAS CAUSA SIETE MUERTOS

La situación en el país ha empeorado desde que Morales renunció a la presidencia el domingo, con varios robos, incendios y otros disturbios en gran parte del país. Al menos siete personas murieron durante las violentas protestas, según la última evaluación de las autoridades.

Al menos 384 personas resultaron heridas en enfrentamientos entre partidarios y opositores de Evo Morales.

La agencia de inteligencia boliviana anunció que el comandante de las fuerzas armadas del país, Williams Kaliman, ya ha ordenado operaciones conjuntas con la policía, utilizando "fuerza proporcional" contra grupos que cometen actos de violencia.