​El Papa Francisco pone fin al secreto pontificio en casos de abuso sexual

El Papa Francisco ha decidido abolir el secreto papal para los casos de violencia sexual y abuso infantil cometidos por miembros del clero. 

La decisión ha sido anunciada el mismo día del cumpleaños del líder de la Iglesia Católica -17 de diciembre-, y va acompañada de una enmienda sobre el delito de pornografía infantil para la Iglesia, que hasta ahora sólo ha abarcado actos con niños menores de 14 años y que ahora se convierten en cualquier contenido que involucre a niños menores de 18 años.

Para el ex presidente del Tribunal Vaticano, Giuseppe Dalla Torre, las enmiendas "contribuyen favorablemente a una transición del derecho canónico a una actitud de autodefensa en relación con el derecho civil a una actitud de confianza y sana colaboración", según el periódico especializado en religión 'Crux'.

El secreto pontificio es el máximo nivel de moderación dentro de la Santa Sede impuesto a ciertas informaciones, como el nombramiento de obispos. Ahora bien, según las revisiones de los documentos internos ordenadas por el Papa Francisco, los casos de abuso sexual de menores deben ser tratados con el fin de "garantizar la seguridad, integridad y confidencialidad" de los implicados. Sin embargo, ahora está claro, como lo hace explícito el 'Vatican News', que "esto no impide el cumplimiento de las obligaciones requeridas por el derecho civil". La Iglesia continúa afirmando claramente que las presuntas víctimas y testigos "no deben ser obligados a ningún tipo de silenciamiento".

A pesar del levantamiento del secreto pontificio para estos casos, el secreto confesional sigue vigente, ya que es de naturaleza sacramental. A pesar de ello, el Arzobispo de Malta, Charles Scicluna (el principal investigador de casos de abuso sexual del Vaticano) recordó a Crux que el secreto papal ha sido invocado "repetidamente como un impedimento para proporcionar información a las víctimas y a las comunidades", algo que ahora no tiene sentido. "En mi opinión, esta decisión es histórica", añadió.

El segundo cambio de Francisco fue el aumento de la edad a la que la Santa Sede considera que se aplica el delito de adquirir, poseer o distribuir pornografía infantil. En lugar de los 14 años que estaban en vigor hoy en día, el crimen ahora incluye a cualquier persona que involucre a víctimas menores de 18 años.

Este es un cambio que el Papa Francisco ha estado defendiendo durante algún tiempo. En febrero, declaró que consideraba que "la edad debería aumentarse para ampliar la protección de los menores". También en julio de 2013, el Papa Francisco promovió una ley en la Ciudad del Vaticano relativa a la pornografía infantil que decía que cubría a "todos los seres humanos menores de 18 años".