La plantilla de Barcelona TV inicia una segunda jornada de huelga para negociar el sueldo de los trabajadores 

La plantilla de Barcelona Televisión y Barcelona FM volverá a hacer huelga este viernes desde las 9 hasta las 15.15 horas, coincidiendo con el pleno municipal, que no se retransmitirá en directo como cada mes, para seguir negociando la recuperación de los sueldos de los trabajadores. 

Según comunica dicha plantilla mediante comunicado de prensa, tras el paro del 19 de septiembre durante el pregón de la Mercè, la dirección y el comité de empresa de BCN Audiovisual han seguido negociando la recuperación de los sueldos de los trabajadores. El objetivo es "suprimir la reducción de entre el 4,5% y el 10% que se les aplica a cada nómina desde enero de 2013 y tratar de recuperar todo lo que han perdido".

La última propuesta de la empresa era retirar el recorte progresivamente, de forma que la plantilla no volvería a cobrar el sueldo entero hasta enero de 2016, pero la asamblea de trabajadores rechazó anoche esta propuesta por 87 votos en contra, 19 a favor y ocho abstenciones. El resultado de esta votación pone de manifiesto "el malestar de la plantilla por los recortes que está sufriendo en BTV" y también por el mantenimiento de un modelo externalizado de gestión, basado en la subcontratación del grueso de la plantilla, que "no resulta adecuado para la televisión y la radio públicas de la ciudad".

La Comisión de Presidencia y Régimen Interior aprobó el 17 de septiembre, con la unanimidad de todos los grupos, dos días antes de la primera huelga, una proposición instando al gobierno municipal a "crear todas las condiciones necesarias para resolver la situación de los trabajadores y las trabajadoras de BCN Audiovisual, que les ha llevado a convocar una huelga los próximos días 19 de septiembre y 3 de octubre para mejorar sus condiciones laborales ".

El comité de empresa pide al gobierno de Xavier Trias que cumpla este mandato y termine con el recorte que hace dos años decretó. La reducción del presupuesto de ICB (la sociedad municipal de la que depende BTV) en diciembre de 2012 fue una decisión política y, dos años después, acabar con este recorte requiere otra decisión política. La plantilla pide al Ayuntamiento que "deje de esconderse detrás el modelo de gestión externalizada por no devolver los sueldos" y, de paso, la dignidad a unos trabajadores que cada día y sin embargo dan lo mejor de nosotros por los medios públicos de esta ciudad.