Diez millones de euros de indemnización separan a Xavi de su sueño americano

Xavi Hernández quiere irse pero, no de cualquier manera. Y la manera tiene un nombre: diez millones de euros como indemnización o, de lo contrario, son 13 millones brutos cada una de las tres temporadas que le quedan, ya que Qatar no paga lo que se dijo en un principio y el egarense tendrá que marcharse a una de las dos ofertas que tiene en Estados Unidos.

De momento la directiva solo tiene buenas palabras para el jugador, pero luego están los números, en los que manda el director general del Barça Antoni Rossich, que es al que le va a tocar devolver a la realidad al Presidente Bertomeu y al Director Deportivo Antoni Zubizarreta que, por lo que parece, viven en una nube de terciopelo.

La causa de tanto desacuerdo, escriben algunas publicaciones, la tienen los negocios familiares de la familia Hernández que han causado un importante agujero en la economía privada del jugador, no porque no sepa gestionar sus intereses, sino porque la crisis ha hecho mella en las empresas mas sólidas y la suya no ha sido una excepción.

Así las cosas ¿se llegara pues a un acuerdo amistoso o tendremos un "culebrón innecesario" como con el bueno de Txema Corbella?