El sospechoso de ser el tercer implicado es un amigo de la madre de Asunta
La tercera persona presuntamente implicada en el crimen de Asunta formaría parte, según fuentes de la investigación, del círculo más íntimo de la madre de la niña, Rosario Porto.
Por ahora no ha trascendido el nombre, pero las sospechas se centran en un perfil muy concreto. La Guardia Civil no está dando palos de ciego y busca a alguien que necesariamente tiene que ser un varón, amigo muy cercano a la madre de Asunta, de su máxima confianza y capaz de participar, presuntamente, en un acto tan terrible.
La hipótesis de la tercera persona no son solo elucubraciones de los investigadores. Hace catorce días que se ha materializado en hechos y se han encargado diligencias concretas para filtrar entre un muy pequeño grupo de sospechosos y hallar las pruebas o indicios que puedan relacionar a este hombre con el asesinato. La identificación, no obstante, entraña una dificultad alta porque ya ha pasado más de un mes desde que se produjeron los hechos. Por ello se están analizando al detalle no solo las relaciones y amistades que mantenía la madre de Asunta, sino también sus actividades tanto en Galicia como en Marruecos, donde trabajaba asesorando en negocios inmobiliarios a empresarios.
También tienen claro los investigadores cuál habría sido el rol de la tercera persona: depositar el cadáver en la pista de Teo, lo que permitiría a los padres de la niña construirse una coartada acudiendo a las 22.31 horas a la comisaría de la Policía Nacional a denunciar la desaparición de su hija.
Pero esa tesis no descarta ninguna otra. La Guardia Civil ha hecho pruebas con el vecino que pasó por el camino y no vio el cadáver para determinar si pudo pasar por alto el cadáver. Los test demuestran que sí. También se ha determinado al menos una manera en la que Rosario, a pesar de su escasa fuerza física, podría haber sacado a la niña del maletero y depositarla en la cuneta del camino.
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