El director del Cervantes confía en abrir un instituto en Seúl y crear un nuevo Observatorio del Español en 2022

García Montero reconoce que le gustaría mejorar las condiciones laborales de la plantilla

El director del Instituto Cervantes, Luis García Montero, se ha fijado como metas para 2022, de salir adelante los presupuestos presentados por el Gobierno, la inaguración del centro en Los Ángeles, la apertura de otro en Seúl y la creación de un nuevo Observatorio del Español, así como, en la medida de lo posible una mejora de los salarios del personal de la institución.

En un encuentro con periodistas antes de la reunión del Patronato del Instituto Cervantes presidida por los Reyes en El Pardo, Montero ha celebrado que desde 2020 el Gobierno pusiera fin a los recortes en el presupuesto para esta institución y este año haya decidido destinar 5 millones más, después de que a raíz de la crisis de 2008 se produjeran recortes de entre el 40 y el 60%.

De aprobarse estos presupuestos, ha dicho, en 2022 "podremos poner en pleno rendimiento el nuevo centro de Los Ángeles y pasar a Consejo de Ministros la apertura de otro en Seúl y posiblemente la creación de un Observatorio para el Español que funcione como el que ya tenemos en Harvard pero muy especializado en la mirada ética a la inteligencia artificial, el lenguaje de las máquinas y la cultura digital".

En cuanto al emplazamiento de este nuevo observatorio, Montero ha aclarado que la decisión aún no se ha tomado y ha recordado que el Instituto Cervantes colabora "con muchas instituciones en el exterior y en el interior y con ás de 100 universidades". En todo caso, sí ha reconocido que le gustaría que pudiera ponerse en marcha el próximo año.

APERTURA EN DAKAR
Pero antes de que termine el año, está prevista la inauguración del nuevo centro en Dakar. Según ha explicado, las obras estarán terminadas para diciembre y el deseo es que puedan ser los Reyes quienes asistan al acto. "Nos haría mucha ilusión", ha reconocido, destacando el apoyo que continuado que ofrece al Instituto Cervantes la Casa Real.

Para ello, ha indicado García Montero, ya se está en contacto tanto con Zarzuela como con la Presidencia de Senegal para intentar cuadrar agendas y que los Reyes puedan inaugurar el Cervantes en Dakar, el primero en el África subsahariana y del que dependerá el Aula Cervantes que hay en Abiyán (Costa de Marfil).

Por otra parte, el director del Cervantes ha señalado que sus dos principales preocupaciones son en primer lugar la plantilla y en segundo lugar la inteligencia artificial. En cuanto a la primera cuestión, ha incidido en que "los salarios de la Administración y en concreto del Instituto Cervantes son bajos".

El Cervantes "es una institución con prestigio pero la red de centros sufre constantemente bajas" porque quienes trabajan en ella aceptan ofertas del sector privado que les pagan más y les permiten "llegar a fin de mes" en ciudades como por ejemplo Lóndres o Nueva York.

Como resultado de ello, "estamos casi siempre intentando suplir a personal en la sede y fuera por los bajos salarios", ha señalado. "A mí me gustaría que las condiciones laborales fuesen mejores pero eso ya depende de toda la Administración General, no son decisiones del Instituto", ha reconocido.

Por otra parte, "la plantilla necesita cursos de formación para enfrentarse a la nueva realidad de la cultura digital", ha destacado García Montero, por lo que "hay que invertir mucho en cursos de formación".

En este sentido, ha apostado por evitar el que, como pasó en su momento con el paso del mundo rural al urbano, que supuso la creación de "muchas bolsas de pobreza", la transformación digital no venga acompañada de "un ser humano redundante y de deshecho" al que las máquinas han relegado y convertido en "inútiles para el sistema".

BUENAS PERSPECTIVAS
En cuanto al impacto de la pandemia en el Instituto Cervantes, ha destacado que esta ha acelerado el proceso de transformación digital al tiempo que en el plano económico en el curso 2020-21 solo se perdieron el 14 por ciento de las matrículas, fundamentales para la parte de "autofinanciación" de la institución, al margen del presupuesto del Gobierno y los fondos europeos que recibe desde el año pasado.

Las previsiones para el curso 2021-2022 "son positivas", ha asegurado García Montero. "El año ha empezado bien y si la pandemia sigue el camino que todos deseamos esperamos volver a tener ingresos normales", ha rematado.

El Cervantes cuenta con un presupuesto de algo más de 126 millones de euros en 2021, de los que los ingresos propios por su actividad docente, cultural y certificadora representan el 44,2% mientras que el 55,8% proviene de las transferencias del Estado. A esto se suman 47,7 millones de fondos europeos.