La CGT señala que es imposible conciliar horarios sin la derogación de la reforma laboral del PP
Para la Confederación General del Trabajo, la propuesta de Báñez “es otra salida en vacío para llegar a ningún sitio y continuar manteniendo toda la estructura laboral como hasta ahora”.
En los últimos días se está hablando sobre la conciliación laboral y adaptar nuestros horarios a las costumbres europeas y poder conciliar de la vida laboral y la vida familiar.
Un debate que ha aumentado desde que la ministra de Empleo, Fátima Báñez, que planteó que la jornada laboral termine a las seis de la tarde, entre otras medidas, a través de un Pacto de Estado.
Para la Confederación General del Trabajo (CGT) la propuesta de Báñez “es otra salida en vacío para llegar a ningún sitio y continuar manteniendo toda la estructura laboral como hasta ahora”.
El sindicato señala que esta iniciativa –que no nueva, puesto que ya fue planteada en varias ocasiones por el PP y el PSOE— “es totalmente incompatible con la Reforma Laboral del Partido Popular y que en ningún caso va a estar dispuesto a derogar”.
La CGT señala además, que esta medida sería incompatible con el Decreto Ley que permite a las Comunidades Autónomas establecer libremente los horarios laborales en sus territorios.
"Tenemos un horario laboral que comienza a las 9 de la mañana y finaliza a las 10 de la noche, ¿cómo se compatibiliza la jornada laboral con la vida personal? Es prácticamente imposible hacerlo", ha comentado Desiderio Martín, Secretario de Formación y Salud Laboral del Comité Confederal de la CGT.
EL TRABAJO QUE SE LLEVA A CASA
En este sentido, la CGT considera que los horarios se establecen únicamente en función de la productividad y no teniendo en cuenta las necesidades familiares y personales de las trabajadoras y trabajadores.
Sobre la creación de una bolsa de horas, la CGT señala otra realidad bien diferente: “El 50 % de las horas extraordinarias que se realizan en este país no son remuneradas. Esto permite a las empresas disponer con gran libertad del tiempo de la plantilla.
Por eso, en relación al fomento del ‘teletrabajo’ que quiere lograr Báñez con este Pacto de Estado, la organización anarcosindicalista asegura que “se trata de otra falacia porque gran parte del trabajo que no se paga en este país es precisamente el que las trabajadoras y trabajadores se llevan a casa”.
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