Tras el espectáculo antidemocrático montado por la Presidenta del Parlament Carme Forcadell y sus aliados de la bancada secesionista, la escalada de falta de libertad y totalitarismo tercermundista ha alcanzado al mismo Parlament que ha visto interrumpida su actividad por la decisión de los mismos actores arguyendo como causa la celebración de un Referéndum, que siendo ilegal, no tendría porque "privar" de su trabajo a todos los parlamentarios, que estoy seguro recibirán a final de mes sus sueldos íntegros como si hubiesen participado en sesudos debates o agotadoras comisiones de investigación.

Naturalmente los diputados constitucionalistas se han opuesto a la medida, pero sus votos no han sido suficientes para evitarla. Había que cerrar la Cámara para evitar escenas televisadas de parlamentarios demócratas protestando airados contra las cacicadas histéricas de la Presidenta, y así se ha perpetrado con nocturnidad totalitaria y así, también, se ha consumado el portazo de forma indecente.

Para más inri, los autores de este atropello ilegal han ocupado las escalinatas de la Generalitat y del Ayuntamiento de Barcelona y han gritado al mundo que España les priva de su libertad de expresión y quiere empapelar a "sus" alcaldes buenos que cometen perjurio y se muestran insumisos ante la ley que juraron, nadie les obligó a ello, defender y representar.

Capítulo aparte merece la actuación de la alcaldesa de Barcelona Ada Colau, la misma que se mantuvo impasible ante la estatua de Rafael de Casanova cuando su colega la también alcaldesa Nuria Marín que representa a Hospitalet la segunda ciudad más importante de Catalunya le recriminaba firme, pero educadamente, a Carles Puigdemont su actuación publica en contra de los 120 alcaldes socialistas a los que puso a los pies de los caballos ante la opinión pública utilizando para ello toda la maquinaria propagandística de su Govern incluida TV3 y su oratoria grandilocuente. En ese momento, todos vimos las imágenes, Colau calló y se fue cobardemente con el indigno President a ocupar su sitio en el protocolo del acto. Y esa meapilas municipal ¿quiere ahora aparecer como gran mediadora de esta monumental felonía institucional? Vamos Ada, que todos sabemos desde hace mucho tiempo cuales fueron tus comienzos como actriz de reparto y como manejas el arte del disfraz.

Mientras, los socialistas siguen, y pelean. Más de veinte mil volvieron a juntarse en la Pineda de Gavá para decirle a los españoles de aquí que también se sienten catalanes y a todos los del Estado, incluidos a los de Esquerra que son los de Bildu que ellos, sí dan la cara y que lo suyo, sí que es una demostración con seña de identidad, que no tienen miedo, y que si lo tienen, se lo aguantan, ofreciendo además soluciones a la crisis que otros han creado para que este país sea todavía gobernable.

Ahora Puigdemont le dice a Rajoy que "no minusvalore al pueblo catalán", menos de la mitad que él representa actualmente. Y el de Pontevedra, que continua atascado, debería haber respondido:..." y Vd. no infravalore al pueblo español, especialmente el que soporta lo insoportable en estos momentos en Catalunya...Pero no lo hizo y por eso el drama continua... ¿Hasta cuándo, señores, hasta cuándo?