La Segunda B y Tercera División están bajo la lupa por posibles amaños

El pasado 20 de diciembre se disputó un encuentro de Tercera División, el Paterna-Castellón, que no debería levantar expectación más allá de nuestras fronteras. Pero según publica Okdiario lo ocurrido en realidad en torno a ese encuentro ha levantado las sospechas de un posible amaño.

El choque, que terminó con un 1-2 favorable a los visitantes, registró hasta 2.000 veces más apuestas de lo habitual para un encuentro de esa categoría, dándose la especial circunstancia de que muchas de esas apuestas llegaban desde Asia. Otro factor que hizo que saltaran las alarmas fue el ilógico patrón que siguieron las apuestas de ese partido. Por ejemplo, después de que el Paterna se adelantara en el marcador, las apuestas por la victoria del Castellón aumentaron haciendo bajar la cuota de 2,63 a 2,05, cuando lo normal es todo lo contrario.

“En el fútbol español, los partidos que no dependen de la LFP no están correctamente vigilados. En Segunda B y Tercera tienen esta lacra de los amaños, la infección se está extendiendo a una velocidad enorme y la Federación Española no hace nada”,denuncia Javier Tebas, presidente de la Liga de Fútbol Porfesional.

Su mayor preocupación es la inacción de la RFEF, que niega la existencia del problema en el fútbol modesto. “Creo que desde la Federación se hace poco para evitar los amaños. La obligación de las instituciones es reducir al máximo los riesgos y poner los sistemas de vigilancia y concienciación social de que es un problema gravísimo”, dice.

A pesar de que en nuestro fútbol modesto se juegan 220 partidos cada fin de semana, asegura que no es imposible “vigilar estos partidos.Nosotros lo podemos hacer. El problema de la RFEF es que ni siquiera se reconoce que tienen ese problema. España tiene una estructura de fútbol con federaciones territoriales. Segunda B son 40 partidos más 10 por territorial en Tercera división. Eso es controlable y no cuesta mucho dinero. La Liga está dispuesta a ayudar a la Federación en este asunto. Con los amaños, relajación cero”, afirma.