Sordo ve recurrente una relación "incestuosa" de empresas con el poder público para condicionar licitaciones

Cree que lo ocurrido en el 'caso Cerdán' tiene pinta de haber sido "bastante grave" pero un adelanto electoral "no arreglaría nada"

El secretario general de CCOO, Unai Sordo, cree que es "un práctica recurrente" en muchos sectores empresariales en España una "especie de relación incestuosa con el poder público y político" para tratar de "atrapar a los reguladores, tratando de condicionar todo lo que son las licitaciones y las concesiones".

En una entrevista a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, el dirigente sindical se ha referido a la supuesta trama de corrupción en la que estarían implicados los exsecretarios de Organización del PSOE Santos Cerdán y José Luis Ábalos y el exasesor de este último, Koldo García, por el supuesto cobro de comisiones ilegales.

Al respecto, Sordo ha afirmado que se vive un momento "en el que todavía los barcos transitan por la niebla". "El barco nodriza, el propio Gobierno, el PSOE, pero creo que el conjunto de los grupos de investidura todavía necesitan que se disipe el panorama, porque es evidente que lo que ha ocurrido tiene pinta de haber sido bastante grave", ha asegurado.

El dirigente sindical ha indicado que se está hablando todavía de informes de la UCO, que recomienda "mirar con un poquito de precaución, aunque es verdad que, "sobre todo, todo el tema de los audios es demoledor".

Y en función de que se vaya disipando esa niebla, es evidente que va a haber una derivada penal, pero va a haber una derivada de responsabilidades políticas que antes o después se pondrán encima de la mesa", ha apuntado. A su juicio, ello conlleva "más incertidumbre sobre la incertidumbre" y "no es lo más conveniente".

PERSECUCIÓN DE LA CORRUPCIÓN
Unai Sordo ha trasladado, como sindicato, un mensaje "contundente de denuncia y persecución de cualquier escenario de corrupción, venga de donde venga y lo protagonice quien lo protagonice".

El secretario general de CCOO ha afimado que ha visto a Santos Cerdán "apenas dos o tres veces, muy de pasada", la última vez en el congreso del PSOE de Sevilla. "No he tratado con él más de cuatro palabras de cortesía, de hola y adiós, no le conozco, la verdad", ha manifestado.

Cuestionado por la responsabilidad que se le puede atribuir a las empresas que aparecen en el informe de la UCO, ha insistido en que habrá que "disipar bien las cosas", pero cree que es "una práctica recurrente en muchos sectores empresariales en España esta especie de relación incestuosa, por decirlo de alguna manera, con el poder público y con el poder político, tratando de atrapar a los reguladores, tratando de condicionar todo lo que son las licitaciones y las concesiones".

"Yo creo que forma parte de la peor cara del capitalismo español, el capitalismo que no sólo corrompe, sino que suele estar en la base del retraso atávico y casi histórico del modelo económico en España. Habría que ser mucho más contundentes con las actuaciones, no sólo de quien se deja corromper, que evidentemente también, y las responsabilidades penales que pudiera tener, sino también con todos aquellos poderes económicos que se han acostumbrado a operar de esta manera", ha asegurado.

Preguntado por si habría que preservar el actual Gobierno 'contra viento y marea' ante un posible cambio a un Ejecutivo de derechas, ha asegurado que "contra viento y marea es difícil hacer las cosas", pero considera que es mejor "avanzar en el conocimiento exhaustivo de todo lo que ha pasado, que el proceso judicial se vaya sustanciando, que se asuman las responsabilidades políticas que se tengan que asumir, pero que se intente mantener una cierta estabilidad institucional, porque "el momento es terriblemente delicado".

"Estamos hablando, por ejemplo, de la cumbre de la OTAN, estamos hablando de la situación de la Comisión y de la Unión Europea donde es fundamental librar una batalla para que no se paralicen los procesos de transición energética, que es la gran oportunidad que tiene España para llegar al pleno empleo en el próximo lustro", ha añadido.

En su opinión, hay "demasiadas cosas de demasiada importancia en juego" como para precipitar "un escenario de profunda inestabilidad institucional que conllevaría un adelanto de elecciones".

"A mí me pasa como a todos que también tengo dificultades para atisbar exactamente dónde nos encontramos y, por tanto, hay que esperar acontecimientos. Pero yo en este momento, evidentemente, no precipitaría un adelanto electoral que, además, creo que tampoco arreglaría nada", ha señalado.

REDUCCIÓN DE JORNADA
Entre otros temas, quedaría sin aprobarse la reducción de la jornada laboral sobre la que se sigue negociando y, al respecto, confía en que pueda salir, porque los grupos que se manifiestan en contra -Junts y PP- tienen que resolver "un problema que tampoco para ellos es menor" y es el hecho de que su electorado "muy mayoritariamente" está a favor de la reducción de la jornada laboral

No obstante, reconoce que la situación está "complicada" y ha precisado que "ya lo estaba antes de estallar todas estas últimas informaciones".

"Pero en esa incertidumbre, los grupos que sostuvieron la investidura de Pedro Sánchez tienen un incentivo adicional para marcar distancias con el Gobierno y claro, un partido como Junts, que conceptual e ideológicamente no comparte la reducción de jornada porque actúa muy al dictado de según qué empresas, tiene aquí una excusa de oro, de alguna manera, para reiterar su oposición y plantear esa enmienda a la totalidad", ha remarcado.

Sordo ha señalado que su sindicato va a "presionar esa decisión" y que "quien la tome, sepa que va a tener un coste político", porque socialmente "es muy valorada la necesidad de reducir por ley la jornada laboral". "Vamos a presionar hasta el último día y yo no doy por enterrada ni mucho menos esta reforma", ha remarcado.