88 países detienen los envíos a EE.UU. por los cambios fiscales
La nueva normativa estadounidense provoca paralizaciones masivas de envíos internacionales y caídas drásticas del correo. Correos y otros operadores buscan soluciones urgentes.
Al menos 88 naciones interrumpen parcial o totalmente los envíos postales hacia Estados Unidos tras la entrada en vigor del nuevo régimen impositivo implementado por la Administración de Donald Trump. La medida elimina la exención de aranceles para paquetes de bajo valor (‘minimis’) inferiores a 800 dólares, provocando una reacción inmediata en los operadores internacionales.
Entre los que han comunicado públicamente la suspensión temporal figura la empresa española Correos, que se suma a la creciente lista de proveedores afectados por la normativa. La situación refleja un impacto inmediato en la logística transfronteriza y en los envíos de comercio electrónico de pequeñas dimensiones.
Impacto inmediato en el tráfico postal
La Unión Postal Universal (UPU), organismo vinculado a la ONU, informa que la implementación del régimen el 29 de agosto ya provoca un desplome histórico del tráfico. “El primer día se produjo un descenso del 81 por ciento en comparación con el viernes de la semana anterior”, destacan desde la organización.
El director general de la UPU, Masahiko Metoki, confirma que ya han comenzado las negociaciones para intentar revertir la situación: “Se han iniciado contactos para tratar de lograr una nueva solución técnica que permita que el correo entre de nuevo en Estados Unidos”.
Consecuencias económicas y comerciales
La suspensión masiva de envíos afecta directamente al comercio electrónico, especialmente a las pequeñas empresas que dependen de los paquetes de bajo valor para exportar sus productos. Las pérdidas económicas pueden ser significativas si la situación se prolonga, y los consumidores enfrentan retrasos importantes en la recepción de pedidos internacionales.
Expertos subrayan que esta medida también podría desincentivar el envío de paquetes internacionales hacia EE.UU., generando un efecto dominó sobre la cadena logística global y sobre las empresas de transporte que manejan volúmenes altos de envíos.
Perspectivas y soluciones
La UPU trabaja con los países afectados para encontrar alternativas técnicas que permitan normalizar el flujo postal. La coordinación internacional será clave para garantizar que los envíos se restablezcan lo antes posible y que el comercio transfronterizo no sufra daños mayores.
Metoki concluye que, pese al impacto inicial, “una solución es posible si hay colaboración entre operadores y gobiernos”. Mientras tanto, la comunidad internacional sigue de cerca la evolución de la situación, conscientes de que cada día de suspensión incrementa la presión sobre los sistemas postales y comerciales.
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