Revenga solicita el concurso voluntario de acreedores tras sus "dificultades de liquidez"

La empresa de ingeniería Revenga ha presentado ante el Juzgado de lo Mercantil nº 19 de Madrid una solicitud de concurso voluntario de acreedores, después de que a principios de año admitiese "dificultades de liquidez".

Según ha informado a BME Growth, mercado en el que cotiza, la mercantil Zubizarreta Procedimientos Concursales, representada por el economista Vicente Zubizarreta Urcelay, ha sido nombrada administrador concursal.

La compañía presentó la solicitud el pasado 1 de diciembre y el Juzgado ha emitido este miércoles un auto en el que, además de nombrar al administrador concursal, ha tomado una serie de medidas al respecto.

En concreto, ha acordado hacer un llamamiento a los acreedores de Revenga para que en el plazo de un mes, a contar desde el día siguiente al de la publicación del auto que declara el concurso en el BOE, comuniquen sus créditos a la administración concursal.

También ha requerido a la administración concursal para que emita el informe de evaluación de la propuesta de adquisición de la unidad productiva presentada y que los acreedores que se personen en el procedimiento puedan efectuar alegaciones.

Se ha comunicado la situación a los sindicatos y las administraciones, suspendido todas las ejecuciones en trámite y mantenido en la empresa las facultades de administración y disposición de su patrimonio con el sometimiento en su ejercicio a la intervención de la administración concursal, a la que recuerda que "debe prestar la máxima colaboración".

Su principal actividad, Revenga Smart Solutions --propiedad en un 75,17% de Grupo Revenga y el resto en capital flotante en BMW Growth-- es el socio tecnológico de los principales gestores de infraestructuras y actores en movilidad (Siemens, Alstom, CAF, Acciona, Ferrovial o Sacyr, entre otros), con una oferta para todos los modos de transporte, que incluyen ferrocarriles, metros, tranvías, túneles, puertos, autopistas, autobuses y aeropuertos.

En diciembre de 2024 vendió su sede en Tres Cantos (Madrid) a la socimi francesa Alta Convictions por 4,7 millones de euros, para quedarse en esas instalaciones como inquilino y con una renta anual de 350.620 euros.