Veinte años son muchos para cambiar el artículo 49 de la Constitución

Hay un tango que hizo popular el gran Carlos Gardel cuyo título es ‘Volver’. La letra refleja el sentimiento de un hombre que regresa a su ciudad de origen, marcado por el dolor, el fracaso y los recuerdos de un amor pasado. Una de sus estrofas dice que “veinte años no es nada”. Para Gardel, los años no son nada porque ha vuelto de nuevo a sus orígenes y espera recuperar todo los que había dejado atrás tras su marcha.

Para el colectivo de la discapacidad, 20 años son muchos. Estos son los que han tenido que esperar a que finalmente PSOE y PP, los dos grandes partidos, se pongan de acuerdo y se avengan a cambiar el artículo 49 de la Carta Magna. Es decir que sustituyan la palabra disminuidos, por personas con discapacidad. Esta iniciativa que está ya registrada en el Congreso para ser debatida en el mismo tendrá que pasar por votación. Se da por hecho que todos los grupos políticos darán su apoyo a la modificación del famoso artículo que tanto ha costado conseguir:20 años, que sí es mucho. Dentro de las modificaciones introducirán algunas aportaciones que mejorarán el actual texto. El nuevo redactado ha tenido el consenso del CERMI (Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad).

Una de las instituciones que ha estado siempre ahí, luchando para conseguir el cambio, ha sido la ONCE, cuyo presidente Miguel Carballeda declaraba días antes, cuando se habla del tema, pero no habían puesto fecha, “que nos dejen  tranquilos a los discapacitados, que hagan ya el cambio, que no nos utilicen”. Posiblemente estas declaraciones del presidente de la ONCE hicieron efecto y pocos días después se hablaba del cambio, tras la reunión de Sánchez y Feijóo, que quizás fue lo único en lo que estuvieron de acuerdo de su encuentro.

Hay que recordar que en España hay 4,5 millones de personas con discapacidad, según los últimos datos del INE. Ello quiere decir que representan el 10% de la población. Uno de cada cuatro ciudadanos tiene una relación muy directa con la discapacidad. Son unos datos que no dejan la menor duda que este colectivo es muy importante, hay que tenerlo en cuenta, y facilitarle todas las herramientas y consideraciones a las que tienen derecho, así lo dice la Constitución. En estos temas debe producirse un consenso de todas las formaciones políticas, también con la sociedad que debe contribuir a la mejora de los derechos del colectivo. Decía Miguel Carballeda que “no somos disminuidos, somos personas discapacitadas muy capacitadas”.

Se acaba el año y el anuncio de la reforma del artículo 49 es la gran noticia de este mes de diciembre, final del 2023 en el que han sido muchas las peticiones de cambio, de conseguir la integración laboral, deportiva, social que ya está casi al completo. Faltaba eliminar la palabra ofensiva de “disminuido” y eso está ya encarrilado. La voluntad, la solidaridad y la colaboración de todos son los elementos que hacen un mundo mejor, un mundo sin barreras de todo tipo. Por eso, el año termina con ilusión, esperanza y el deseo de que el 2024 sea un poco mejor que este año que se marcha, y que no haya que esperar 20 años para mejorar las leyes que afectan a las personas con discapacidad. 

Que 2024 traiga a todos, salud, trabajo, solidaridad y sentido común.

¡Feliz 2024!