Milei se reúne con Edmundo González en Madrid en un encuentro marcado por el atentado contra Uribe

El presidente argentino y el opositor venezolano defienden la "libertad de pensamiento" tras el intento de asesinato del senador colombiano

El presidente de Argentina, Javier Milei, y el líder opositor venezolano Edmundo González han mantenido este domingo un encuentro en Madrid dominado por el intento de asesinato del senador y aspirante presidencial colombiano, el conservador Miguel Uribe, ejemplo para ambos interlocutores de la importancia de defender "la "libertad de pensamiento" en la región.

Milei se encuentra de visita no oficial en España para participar como invitado estrella del Madrid Economic Forum que se está celebrando en el Palacio de Vistalegre, pero ha aprovechado la mañana para mantener esta reunión con González, excandidato presidencial, que en septiembre del año pasado pidió asilo político a las autoridades españolas ante el temor de represalias del Gobierno venezolano.

"En un día marcado por la violencia en Colombia, conversamos sobre la urgencia de fortalecer la región con valores democráticos, cooperación y solidaridad frente a los embates del autoritarismo", ha manifestado González a través de un mensaje publicado en su cuenta de la red social X.

El senador colombiano se debate ahora entre la vida y la muerte tras recibir, según un primer informe de la Fiscalía, dos disparos por la espalda durante un mitin en el suburbio de Fontibón, en Bogotá, efectuados presuntamente por un joven sicario ahora detenido. El senador ha sido intervenido de urgencia esta madrugada y su estado es "crítico", según su familia.

"Ambos líderes", hizo saber después la oficina de González en un comunicado, "coincidieron en la necesidad de fortalecer una alianza latinoamericana basada en la libertad, la dignidad y el respeto a la voluntad popular, y alertaron sobre el peligro creciente de la violencia política y armada como herramienta represiva".

González aprovechó también para agradecer a Milei el respaldo concedido por la Embajada argentina en Caracas a los perseguidos políticos de Venezuela como "vivo ejemplo de que la libertad se defiende sin fronteras".