Vídeo | Feijóo se pronuncia sobre la ausencia de Abascal en el desfile del 12 de octubre: "Tendrá que explicarlo"
El presidente del PP aborda la decisión de Vox de no acudir al acto con los reyes y recalca que este comportamiento exige una justificación pública, destacando la relevancia política de la jornada.
El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, se pronuncia este domingo sobre la ausencia de Santiago Abascal en el desfile del Día Nacional y la recepción ofrecida por los reyes en el Palacio Real. Feijóo subraya que la decisión de no participar en ambos actos exige aclaración: “Tendrá que explicarlo”. La jornada, que reúne a autoridades, militares y representantes políticos, se convierte así en un foco de debate por la postura de Vox.
El contexto de la ausencia de Vox
Santiago Abascal decidió no acudir al desfile ni a la recepción real alegando que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, utiliza estos actos “para blanquear un Gobierno sumido en una corrupción escandalosa y responsable de gravísimas traiciones a los intereses de España”. Antes del inicio del desfile, Abascal aseguraba estar tranquilo con su decisión y convencido de que era la correcta, dejando claro que su postura se mantendrá en el tiempo y que solo coincidirá con el Ejecutivo en los foros parlamentarios. “Nosotros solo vamos a coincidir con este gobierno en esos foros en los que podamos decir al Gobierno que es un Gobierno corrupto, indecente y que ha traicionado a los españoles”, afirmó.
Esta estrategia de Vox refleja un posicionamiento consciente y calculado. La formación prioriza la confrontación mediática y parlamentaria frente a la participación en actos institucionales, un gesto que añade tensión a una jornada tradicionalmente de unidad y protocolo.
Feijóo y la respuesta institucional
Frente a esta decisión, Feijóo adopta un tono institucional y centrado en la relevancia del acto: “Aquí hemos venido con el rey y con los soldados de España, nada más. Tendrá que explicarlo”. Sus palabras buscan subrayar la necesidad de responsabilidad política y, al mismo tiempo, proyectan la imagen del PP como garante de la participación en eventos de Estado, en contraste con la estrategia de Vox.
El líder popular sitúa la discusión en el plano del deber institucional y la transparencia, recordando que los actos del Día Nacional no son solo ceremoniales, sino también un reflejo del compromiso de los partidos con las instituciones y con los símbolos de la nación.
Relevancia política del 12 de octubre
El Día Nacional de España, con desfile militar y recepción real, representa históricamente un escenario de unidad institucional y reconocimiento a las Fuerzas Armadas. La ausencia de un líder político en estos actos adquiere un fuerte simbolismo, generando debates sobre lealtad, estrategia electoral y mensajes hacia la ciudadanía.
La decisión de Abascal, en este contexto, consolida la narrativa de oposición dura al Gobierno y permite a Vox marcar una diferencia visible frente a otros partidos en un acto de gran repercusión mediática. La tensión generada no solo afecta la relación con el PP, sino que también se percibe como un gesto calculado para enfatizar la crítica a Sánchez y reforzar la imagen de partido de oposición frontal.
Implicaciones políticas
La ausencia de Vox pone de relieve diferencias claras entre las estrategias de los principales partidos de la derecha española. Mientras el PP apuesta por la participación institucional como muestra de respeto al protocolo y a las instituciones, Vox opta por la confrontación simbólica, transmitiendo a su electorado un mensaje de firme oposición y desconfianza hacia el Gobierno.
Feijóo, al exigir explicaciones, busca situar la responsabilidad política de la decisión en Abascal y deja claro que los actos institucionales no pueden ser utilizados como herramienta de propaganda, reforzando al mismo tiempo la imagen del PP como partido que respeta las tradiciones y los símbolos nacionales, sin renunciar a la crítica política.
Escribe tu comentario