Las tensiones en la izquierda no amainan tras el buen resultado de Extremadura y se pondrán a prueba de nuevo en Aragón

En esta CCAA las negociaciones son complejas e IU en CyL aplaza la ratificación de su pacto con Sumar para llamar a Podemos a la unidad

El buen resultado cosechado en Extremadura no amaina las tensiones entre los partidos de la izquierda alternativa, que sin solución de continuidad deben afrontar negociaciones 'exprés' para explorar la posibilidad de una candidatura de unidad que volverá a poner a prueba las relaciones entre las distintas organizaciones del espacio.

Aparte, IU en Castilla y León ha optado por posponer la ratificación interna de su preacuerdo electoral con Sumar para buscar una candidatura de unidad con mano tendida a Podemos, para emular así el espíritu de la candidatura extremeña.

La candidatura Unidas por Extremadura, la marca que comparten Podemos e IU sin Sumar, rompió la nefasta tendencia en comicios autonómicos que arrastraba desde 2019 la izquierda más allá del PSOE, al doblar casi escaños al pasar de cuatro a siete diputados.

Por un lado, IU ha calificado el desempeño de la confluencia de "espectacular" y se tendrá cuatro diputados en el futuro grupo parlamentario, uno más que Podemos que tendrá tres escaños incluido el de la cabeza de lista, Irene de Miguel.

Sin embargo, los 'morados' han alertado que el resultado global dado que aunque la izquierda alternativa se ha reforzado, solo rentabiliza parcialmente del hundimiento del PSOE y vuelve a apelar a la "alerta antifascista" ante el fuerte ascenso de Vox, determinante en la gobernabilidad al conformar mayoría holgada con el PP.

El crecimiento en Extremadura ha vuelto a reabrir el debate de la unidad en la izquierda, que volverá a testarse en Aragón con un panorama más plural y un contexto si cabe más complicado que en Extremadura, dado que hasta la fecha Chunta, Podemos e IU han confluido siempre por separado. Y es que en sectores de la izquierda recalcan que en Extremadura es un caso singular donde la confluencia de fuerzas venía ya muy trabajada.

NEGOCIACIÓN DIFÍCIL EN ARAGÓN, SIN EXPERIENCIAS DE UNIDAD
Por ahora, según destacan las distintas formaciones, se han dado conversaciones multilaterales entre los distintos partidos para sondear el terreno de una lista conjunta para la que apenas tienen tiempo, pues el viernes vence el plazo.

La sensación es que, a diferencia de Extremadura donde el acuerdo fue rápido, se va a apurar las negociaciones hasta el final y aunque las formaciones abren la puerta a una candidatura conjunto, fuentes de los partidos implicados reconocen que un eventual pacto se antoja difícil, pues aún afloran recelos y las relaciones deterioradas por los choques a nivel estatal.

La Chunta, la formación que ahora tiene más representación en el espacio con tres escaños, se mostró pesimista este domingo sobre las opciones de un frente amplio, demandó una mesa de negociación conjunta y aludió a que había vetos cruzados entre Podemos, IU y Sumar.

Sin embargo, los regionalistas confluyen con Sumar e IU a nivel nacional y forman parte del grupo parlamentario, por lo que habrá que ver si esas relaciones en el plano estatal tienen impacto en las conversaciones, dado que Sumar es partidario de apoyar a sus aliados.

En su caso de CHA, varias voces del espacio subrayan que su papel es complicado, dado que están inmersos en primarias y el partido está ahora en plena pugna entre sectores ver cómo afrontan estos comicios.

REPROCHES DE VETOS Y AVISO: ALIANZAS DESDE EL ARRAIGO TERRITORIAL
Mientras, Sumar también aspira a formar parte de esta candidatura y este lunes ha apelado a conformar una lista de toda la izquierda sin vetos. La formación creada por Yolanda Díaz recalca que solo así se puede capitalizar en la izquierda un previsible descenso del PSOE y centra sus conversaciones con CHA e IU Aragón.

Por su parte, la dirección estatal de Podemos se ha abierto a intentar una candidatura de unidad con fuerzas de la izquierda alternativa sin descartar el caso de la Chunta, aunque mantiene su rechazo a que Sumar figure como partido al percibir a esta formación subordinada al PSOE. Su diagnóstico es el auge de Vox requiere respuestas y han modulado su posición incidiendo en su afán de lograr candidaturas lo más amplia posibles con fuerzas afines.

De su lado, IU ha recalcado que no existe "veto de nadie" para intentar un frente amplio electoral y que esas denuncias solo "buscan ganar el relato". En todo caso, ha insistido en que su objetivo es buscar una candidatura amplia en la izquierda, aunque no integre a todas las organizaciones, dado que en esta comunidad la fragmentación no penaliza tanto como Extremadura, sobre todo en la provincia de Zaragoza.

Tanto los 'morados' como la federación que dirige Antonio Maíllo han enfatizado que las opciones de alianza pasan por un elemento clave, el arraigo de las organizaciones y las opciones de acuerdo de aquellas fuerzas que existen en el territorio.

MOVIMIENTO EN CYL
Una apelación que parece un mensaje implícito a Sumar, que es la formación con un papel más débil en cuanto estructura autonómica. Así, fuentes del espacio exponen a Europa Press que los correligionarios de Díaz son el elemento más débil, al carecer apenas de estructura en las comunidades y no haber podido capitalizar el resultado en Extremadura, al no formar parte de esta coalición.

Sin embargo, Sumar reivindica su papel en el Gobierno como impulsor de las principales medidas sociales y su disposición a la unidad, que ya se ha plasmado en preacuerdos electorales con IU y otras fuerzas en Andalucía y Castilla y León, las otras dos citas electorales previstas en 2026. Por tanto, no contemplan quedar orillados en estos territorios.

Mientras, IU en Castilla y León ha comunicado que, a la luz de los resultados en Extremadura, ratifica su apuesta con mano tendida a Podemos y decide posponer el referéndum interno a sus bases para decidir si aprueba el proceso de concurrencia conjunta con Movimiento Sumar y Verdes Equo.

De nuevo en el caso de Aragón también aluden a la opción de que la unidad se pueda dar al menos de forma parcial en la provincia de Teruel, una circunscripción que se antoja clave para que la izquierda alternativa pueda arrebatar un escaño clave al PP que abortaría de forma definitiva su pretensión de lograr mayoría absoluta.