Los muchachos de Arran, una de las ramas violentas de la CUP, llevan una temporadita de actividad intensa de creación "cultural", pintando sedes de partidos políticos.
El líder del PP también pide "supervisar" si la Generalitat financia a Arran (CUP).
El ministro del Interior invita a no dar un "altavoz excesivo" a los ataques con lanzamiento de pintura protagonizados por Arran, las juventudes de la CUP, contra la casa del juez del Tribunal Supremo e instructor del 'procés', Pablo Llarena, o la comisaría de la Policía en Terrassa.
La organización insiste en que "los jueces deben poder desempeñar sus funciones sin presiones indebidas o sin cualquier coacción o amenaza, explícita o implícita".