El Atlético de Madrid ha completado una actuación gris a 7.000 kilómetros de casa y no ha podido pasar del empate sin goles en su visita al Astana, en partido correspondiente a la cuarta jornada de la Liga de Campeones, un resultado poco valioso vista la entidad del rival y que obligará al club rojiblanco a seguir peleando por el pase a octavos de final en sus últimos partidos ante Galatasaray y Benfica.