Uno de los detenidos es un ciudadano español que iba conduciendo ebrio con una furgoneta llena de bombonas de gas | Por la "amenaza terrorista" se canceló un concierto de rock.
Le atribuyen los delitos de atentado contra agentes de la autoridad, conducción temeraria, lesiones y daños. Pasó dos días bajo custodia en una unidad psiquiátrica.
El origen se encuentra en una vivienda en la que había cuatro bombonas, dos de ellas, con fugas. El edificio se encuentra bastante dañado y los Bomberos estudian apuntalarlo.