Los desastres climáticos afectaron el año pasado a 90 millones de personas en todo el planeta.
A pesar de que España sea uno de los países más vulnerables a las consecuencias del cambio climático, el Gobierno no parece muy preocupado con el tema, a juzgar por sus políticas ambientales, que solo se ciñen a cumplir con lo marcado por la Unión europea.
La cumbre del clima (COP21) de París aprobó el primer acuerdo universal de lucha contra el cambio climático, en el que cerca de 200 países, tanto desarrollados como en desarrollo, se comprometen de manera histórica a transitar de manera conjunta hacia una economía baja en carbono.
El Papa ha revelado que sigue con "viva atención" los trabajos de la Cumbre del Clima de Paris y ha pedido oraciones para que "el Espíritu Santo ilumine a todos los que deben tomar decisiones así de importantes y les dé el coraje de tener siempre como criterio de elección mayor el bien de la entera familia humana".