Muere tras consumir grandes cantidades de cocaína para poder mantener dos trabajos

Jake Scicluna, de 35 años, murió tras consumir una gran cantidad de cocaína, en un intento de tener más energía para seguir manteniendo dos trabajos, uno de mañana y otro de noche.

El hombre se drogaba después de terminar su trabajo diurno para conseguir mantenerse despierto como portero de discoteca. 

Jake habí abierto un estudio de tatuajes -que era su principal fuente de ingresos- hace unos cinco años, aunque el dinero que ganaba no era suficiente para hacer frente a la deuda que tenía, por lo que optó por buscar un segundo empleo. 

La salud de este hombre residente en Stockport, en el Reino Unido, comenzó a deteriorarse cuando los vasos sanguíneos de su nariz empezaron a dilatarse, provocándole algunas dificultades respiratorias como consecuencia del consumo de cocaína. 

Según 'The Sun', en noviembre de 2017, Jake se sintió mal y fue trasladado al hospital, donde acabó muriendo. La autopsia reveló que tenía cantidades elevadísimas de droga en su organismo.