viernes, 29 de marzo de 2024 14:17
Opinión

ELECCIONES PRESIDENCIALES EN COLOMBIA: NI VENCEDORES NI VENCIDOS

Jaime Ensignia
Jaime Ensignia
Jaime Ensignia, sociólogo, Dr. en Ciencias Sociales y Económicas de la Universidad Libre de Berlín

Jaime Ensignia, sociólogo, Dr. en Ciencias Sociales y Económicas de la Universidad Libre de Berlín. Fue director sociopolítico de la Fundación Friedrich Ebert en Chile (1994-2014). Director del Área Internacional de la Fundación Chile 21. Colaborador del Barómetro de Política y Equidad.

Ivan Duque 2018

Iván Duque gana las elecciones en Colombia


Es verdad, es un título de una columna propia de realismo mágico. No olvidemos que estamos analizando una contienda presidencial en el país cuna de esta corriente literaria hispanoamericana que se denominó “realismo mágico”, teniendo además a un colombiano como máximo exponente de este movimiento, el premio Nobel de Literatura, Gabriel García Márquez.


ESTRUCTURA Y CONTEXTO


Nos parece importante reseñar algunos datos duros de esta nación: cuarta economía más importante de América Latina y el Caribe (ALyC),y en el lugar 32 de las economías a nivel mundial. Con una población de más de 47 millones y medio de habitantes, un PIB de US 418.422 millones, cuenta con una pobreza de alrededor del 26,9% y una desigualdad que ostenta el record de ser el tercer país más desigual del mundo y el segundo a nivel de ALyC, según estudios del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), del Banco Mundial y de la CEPAL, recientemente. Tiene una tasa de desempleo que oscila entre el 9% y el 11% y con un salario mínimo de US 273. Su endeudamiento público es del 47% del PIB. Los principales sectores económicos colombianos son el Petróleo, el cuarto productor en Latinoamérica, el tercer productor mundial de Café, y el primer productor mundial de Coca, con unas 200.000 hectáreas para su cultivo.


Los principales desafíos como Estado-nación es la lucha contra el Narcotráfico, disminuir la ostentosa desigualdad, combatir el flagelo de la corrupción –el índice de corrupción alcanza el lugar 90 de 176 países del mundo-, desarrollar un modelo económico productivo, sustentable, el cual se aparte del modelo económico extractivista predominante en el país, y enfrentar los problemas de inmigración que vive actualmente Colombia de su vecino país, Venezuela. Al respecto, se calcula que cerca de un millón de venezolanos han pasado a Colombia en este año y medio. Sin embargo, uno de los desafíos mayores a los cuales está enfrentada esta nación, es la pacificación del conflicto armado.El gobierno de Juan Manuel Santos ha dado un paso histórico con el Acuerdo de Paz entre el gobierno colombiano y las guerrillas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias Colombianas (FARC) -pese a todos los inconvenientes que significó la derrota del Si en Plebiscito de 2 de octubre-, lo que obligó a renegociar este acuerdo de paz. Aún, el gobierno de Santos busca un acuerdo de Paz con una pequeña guerrilla -el Ejército de Liberación Nacional (ELN)-, que de seguro será tarea del próximo presidente colombiano, Iván Duque, el cual asumirá el gobierno el 7 de agosto próximo, concretarlo o, bien postergarlo. 


En todo caso, desde 1960 a la fecha, el conflicto armado colombiano ha costado la vida a más 260.000 personas, con 83.000 desaparecidos, y 7,4 millones de connacionales desplazados. 


El saliente gobierno del presidente J.M. Santos, más allá de ser el promotor de esta acuerdo de paz con las FARC, lo cual le valió el premio Nobel de la Paz en el 2016 logra que Colombia sea aceptado en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y además miembro de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), a fines de mayo del presente año.Recordemos, que Colombia, bajo la dirección del presidente Santos, es desde los inicios (la firma del Acuerdo es el 6 de junio de 2012) miembro de la Alianza del Pacífico, junto a México, Chile y Perú, iniciativa de integración económica en la región.


LA CONTIENDA ELECTORAL PRESIDENCIAL: LA PRIMERA VUELTA


La primera vuelta presidencial, realizada el 27 de mayo tuvo 5 candidatos que compitieron por pasar ala segunda vuelta: Iván Duque, del Centro Democrático, partido del expresidente Uribe y apoyado además por el ex presidente Andrés Pastrana; Gustavo Petro, un exmilitante del grupo guerrillero M19 con su coalición Colombia Humana; Sergio Fajardo con su movimiento Compromiso Ciudadano por Colombia, en donde convergieron el Partido Verde y el Polo Democrático, organización de la izquierda colombiana; Germán Vargas Lleras, candidato del actual gobierno de José Manuel Santos, y; Humberto de la Calle, representando al Partido Liberal. 


¿Cómo fueron los resultados de estos candidatos en esta primera vuelta?

1-. Iván Duque, obtiene 7.616.857 votos, lo cual significó el 39,34%.

2-. Gustavo Petro, logra 4.855.069 sufragios, lo que es igual al 25,08%.

3-. Sergio Fajardo, alcanza 4.602.916, que significa el 23,78%.

4-. Germán Vargas Lleras con 1.412.392 votos, logra el 7,30% y,

5-. Humberto de la Calle, alcanza los 396.151 votos que le dan el 2,05%.


Las dos primeras mayorías fueron para Iván Duque y Gustavo Petro. Significativa fue la votación de otro candidato del espectro político progresistas y de izquierda, Sergio Fajardo con su 23,73% de la votación. 


Tanto la candidatura de Petro como la de Fajardo, no lograron confluir en un solo candidato y de esa manera enfrentar a las fuerzas políticas de la Colombia conservadora, representada por el candidato Duque en esta primera vuelta electoral-presidencial.Por cuanto, son estas mayorías, la de Duque y de Petro las que disputaron el balotaje el pasado domingo 17 de junio.


EL ESCENARIO POLÍTICO DEL BALOTAJE


Dentro del vasto panorama electoral latinoamericano de elecciones de toda índole en este año 2018, la elección presidencial de Colombia era observada por la opinión pública internacional como una de las tres más importantes convocatorias presidenciales en la región –las otras son, la de México, el 1ro de julio y luego la de Brasil, el 7 de octubre de 2018-.


Uno de los rasgos interesantes de mencionar, es que por primera vez en más de 60 años estos comicios electorales, en el caso de las elecciones colombianas, tanto en la primera como en la segunda vuelta, se dan en un escenario político y social de paz y tranquilidad, luego del exitoso y complejo proceso de paz y desmovilización del principal movimiento guerrillero de Colombia, las FARC. En este sentido, hubo una gran participación de la ciudadanía colombiana, del 54,22% en la primera vuelta y del 53,86%, en el balotaje. Como toda contienda electoral, en ambas fases electorales, éstas estuvieron plagadas de fuertes confrontaciones entre las candidaturas principales. 


A Petro se lo tildó de castrochavista, se le enrostró su pasado militante del grupo guerrillero M19. Duque, por otro lado, fue señalado de ser una marioneta del expresidente Álvaro Uribe, y de estar en contra el proceso de paz, cuestión en parte real. 


Sobre todo en el balotaje se pudo constatar una creciente polarización llevada a cabo por los comandos de ambos candidatos y del uso de las conocidas internacionalmente campañas del terror, como la Colomzuela, arguyendo el temor y el miedo, de que Colombia se transformase una Venezuela tipoMaduro. Esta campaña de la posverdad fue mayormente utilizada por la candidatura de Duque en opinión de muchos analistas colombianos. Pese a estas fricciones en la atmósfera política, que embargo esta segunda vuelta, motivó que ambas candidaturas tuvieran que redireccionar sus campañas en la búsqueda del voto de centro, moderando sus propuestas y sus programas de gobierno.


¿CUÁL FUE EL RESULTADO DE ESTE BALOTAJE?


De un universo de 19.511.168 de personas que asistieron a las urnas, 10.373.080 votaron por Iván Duque, alcanzando el 53,98%, mientras que su contendor, Gustavo Petro recibe una votación de 8.034.189, significando esto el 41,81% de los comicios generales. Si comparamos los resultados, es Duque el vencedor inapelable de estos comicios, la diferencia es de 12,17% en favor de él. El candidato ganador, Duque, del Centro Democrático, partido conformado por el expresidente Uribe, que contó con el apoyo de otro ex presidente, Andrés Pastrana, fue un conglomerado político y social que aunó a todas las fuerzas conservadoras tradicionales colombianas, algunas de ellas de claro contenido ultraderechista, todo con el objetivo central: impedir que la izquierda, representada por Petro, llegase al gobierno. El mismo Duque, ya lo señalábamos, tuvo que moderar su discurso, constatando que no haría trizas el Acuerdo de Paz, definiéndose como de “extremo centro”, categoría un tanto imprecisa y difusa.


Un elemento interesante de este proceso eleccionario colombiano y digno de destacar es que por primera vez, un candidato de izquierda, Gustavo Petro, pasó a la segunda vuelta y pudo “teóricamente”, de haber logrado los votos de la candidatura de Sergio Fajardo, representante dela centro izquierda y de otros sectores del progresismo de este país, haberse convertido en presidente de esta nación. Petro, es el candidato que se lo identifica con la idea del cambio, en una Colombia que ha estado dominada por décadas por las fuerzas políticas liberales y conservadoras, y por la violencia política. Petro, ha demostrado, según analistas colombianos e internacionales ser un auténtico fenómeno electoral y de masas, con un fuerte poder argumentativo, convincente y orador destacado. 


Sus propuestas, se podrían resumir en las siguientes: 1) establecer un modelo económico más inclusivo con el objetivo central de combatir la pobreza y desigualdad imperante en vasta zonas del país; 2) un sistema de banca pública que garantice créditos a bajo costo; 3) alejarse de la dependencia del petróleo y el carbón para dar paso a energías limpias; 4) un sistema gratuito y universal de acceso a la educación; 5) un alza de impuestos a quienes poseen grandes extensiones de tierras improductivas, 6) una apuesta por la modernización del campo y una democratización más profunda de la democracia colombiana. Por cierto, otras medidas tendientes a la seguridad nacional y la lucha contra el narcotráfico fueron parte sustancial de su programa de gobierno. Petro no logró conquistar la presidencia, pero lo concreto es que la geografía política de la Colombia de hoy ha cambiado. 


Una importante fuerza política ha emergido: una izquierda democrática y remozada en conjunto con importantes sectores del progresismo colombiano. 


Estas fuerzas políticas y sociales serán un dique de contención al gobierno conservador y sus políticas regresivas presidido por el candidato uribista, Iván Duque. El candidato Petro, señalaba en la noche de los cómputos finales “que no se sentía derrotado, es una lucha a los 200 años de desigualdad y soledad de la sociedad colombiana” y, que asumiría el liderazgo de la oposición en el parlamento y en las luchas de la sociedad civil.


Finalmente, tal como analiza Uta Thofern, directora de la redacción latinoamericana de la Deutsche Welle (DW), en su columna de Opinión: Colombia, elecciones sin ganador (www.dw.de , 18/06/2018): "Nada de esto será fácil. Duque no tiene mayoría propia en el Congreso y Colombia ya no es el mismo país que Uribe gobernó una vez. El resultado electoral mostró claramente que, si bien las posiciones izquierdistas aún no consiguen mayorías en una Colombia tradicionalmente conservadora, sí son ampliamente aceptadas en la sociedad: con más de un 40 por ciento de los votos, el candidato populista de izquierda Gustavo Petro alcanzó un resultado sorprendentemente bueno", ergo, ni vencedores ni vencidos.



Artículo original publicado en catalunyapress.es

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