El batacazo del Espanyol en el Coliseum
El equipo de Rubí encaja su tercera derrota consecutiva en el campo del Getafe (3-0) y se empieza a hundir en la tabla de La Liga.
El sueño de Rubí se desinfla. La ausencia de Marc Roca, del cerebro percio en medio del campo, y la de Sergio García, para hacer la pareja de la zaga de ataque de los de Cornellà- El Prat, se han hecho notar hoy en el Coliseum. El Espanyol ha encajado una derrota en casa del Getafe (3-0) en un partido donde el conjunto perico ha mostrado un nivel mucho más bajo del que venía enseñando esta temporada.
Ni con los cambios Leo Baptistao, ni con Puado –pichichi perico la temporada pasada con el filial- ni con Melendo, el Espanyol ha conseguido dar la vuelta al partido. Tras una primera parte muy aburrida, sin ocasiones ofensivas por parte de ninguno de los dos equipos y con la pelota sin salir del mediocampo, el Getafe salió la segunda mitad a ganar tras 3 jornadas sin encontrarse con la victoria y lo consiguió.
Un resultado decepcionante del equipo de Rubí que lleva 3 jornadas seguidas perdiendo y que se desplaza provisionalmente a la quinta plaza y que, por su parte, al Getafe lo pone en zona europea en la sexta posición.
El primer gol para los madrileños llegaba de las botas del veterano Jorge Molina en el 55, consiguiendo su cuarto gol en Liga esta temporada con 36 años, haciendo un reverso para evitar la defensa del Espanyol y que batía a Diego López, tras un primer aviso de Amat que el arquero perico despejaba ya con problemas.
Este primer tanto ya hacia entrever a un Espanyol sin ideas en el campo, estancado, perdido en un partido que el conjunto de Bordalás hizo suyo en el 64 con el segundo gol de Jaime Mata, por un error garrafal en defensa del internacional perico Mario Hermoso, y ya en el 79, Atunes ponía el 3-0, el punto y final al partido, encontrándose con el gol tras casi 2 años sin marcar.
Un encuentro cómodo a partir de la segunda parte para un Getafe solvente, del que incluso su arquero evitó el gol de la redención perica taponando una acción de Borja Iglesias ya en los minutos de descuento.
El Espanyol se despertó tarde en el partido, ya en los minutos de descuento, que fueron 7 por un fallo eléctrico que se produjo en el estadio durante el partido.
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