jueves, 25 de abril de 2024 17:25
Internacional

​Trump quería detener migrantes con disparos, caimanes y serpientes

Se dice que Donald Trump pidió a sus colaboradores que calcularan los costos de tener una trinchera con caimanes y serpientes en la frontera mexicana. También quería que el muro se construyera para ser electrificado.

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El presidente de EEUU, Donald Trump, en el despacho oval



El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, llegó a pedir a colaboradores cercanos responsables de la política de inmigración de Estados Unidos que estudiaran la posibilidad de construir una trinchera con caimanes y serpientes en la frontera con México.


"En privado, el Presidente hablaba a menudo de la posibilidad de reforzar un muro en la frontera con una trinchera llena de agua y con serpientes y caimanes, instando a sus colaboradores a hacer una estimación de los costes", dice 'The New York Times'.


Además, dice ese periódico, Trump quería que la pared de la frontera fuera "electrificada y con clavos capaces de cortar carne humana en la parte superior".


Además, el presidente estadounidense habría insistido con su equipo en la posibilidad de que el ejército pudiera disparar a los migrantes, apuntando a sus piernas.


Las solicitudes se habrán hecho en una reunión en marzo de este año, sobre la cual 'The New York Times' está publicando detalles, en lo que es una pre-publicación adaptada del libro 'Border Wars: Inside Trump's Assault on Immigration',  de los autores Michael D. Shear y Julie Hirschfeld Davis, periodistas de esa publicación.


En esta reunión, que estaba programada para durar 30 minutos pero que terminó después de las dos de la tarde, Donald Trump expresó su descontento con su equipo, especialmente con la entonces secretaria de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen.


"Me estás haciendo quedar como un tonto", dijo Donald Trump, pidiendo a su equipo que trabajen juntos para aumentar la política de control migratorio, incluyendo el cierre de la frontera con México en su conjunto, impidiendo la entrada de personas y bienes. "Mi campaña era sobre esto, esta es mi causa."


En una conversación con Kirstjen Nielsen, cuyo servicio como secretaria de Seguridad Nacional no complació a Donald Trump, quien la despidió en abril de este año, el presidente de Estados Unidos también ha hecho caso omiso del hecho de que el ejército no está autorizado legalmente para disparar a los aviones teledirigidos utilizados por las redes de tráfico en la frontera sur de Estados Unidos.


"Kirstjen, no me escuchaste la primera vez, querida", dijo Donald Trump. "Dispárales. Cariño, dispárales, ¿de acuerdo?"

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