MUJERES REALES

Las oficinas del Registro de la Propiedad de Bilbao, Madrid, Sevilla, Barcelona y Zaragoza recibieron esta semana numerosas solicitudes de mujeres que se acercaron a sus instalaciones "con el objetivo de registrar sus cuerpos como protesta por la expropiación que continuamente sufren las mujeres de sus propios cuerpos".

Las oficinas del Registro de la Propiedad de Bilbao, Madrid, Sevilla, Barcelona y Zaragoza recibieron esta semana numerosas solicitudes de mujeres que se acercaron a sus instalaciones "con el objetivo de registrar sus cuerpos como protesta por la expropiación que continuamente sufren las mujeres de sus propios cuerpos".

La acción, idea de la artista y activista madrileña, Yolanda Domínguez, ha querido hacer visible el conflicto de autoridad sobre el cuerpo de la mujer . En este sentido "un grupo de mujeres acuden al Registro de la Propiedad de los Ayuntamientos de varias ciudades, para registrar el derecho a la posesión y libre uso de su propio cuerpo. Con el impreso oficial de bienes muebles y hartas de que otros decidan por ellas, pretenden legalizar y dejar constancia de que su cuerpo es suyo y nadie debe impedir ni condicionar su toma de decisiones".

Las mujeres reales acometen acciones como las que os he descrito y son capaces de quererse tal y como son, abandonando los estereotipos que quieren esculpirlas en copias de 90-60-90 o imponerles maternidades no deseadas o roles típicos- tópicos por no llamarlos retrógrados.

El sentimiento de pertenencia a un género valioso, hace que las mujeres reales nos sintamos por encima de las derechas, las izquierdas y los extremismos, cuando se trata de defender los derechos por los que lucharon algunas que ya no están, por aquellos que nos afectan a todas las que estamos, las que representan el futuro y las que están por venir.

Las mujeres reales van hasta el final persiguiendo sus objetivos y además cuentan con un buen número de hombres que coinciden con sus reivindicaciones basados en el respeto de derechos básicos. Porque la igualdad se construye desde el día a día y se vuelve posible en relaciones igualitarias. Si hay mujeres reales esta sociedad está viva y hay esperanza.

Enhorabuena a todas las mujeres reales que acudieron a las oficinas del Registro de la Propiedad, las que han participado en el tren de la alegría y las que día tras día se ponen en valor y muestran su valía. Y gracias a todos esos hombres que nos apoyan incondicionalmente.