Catalá recuerda que la obligación de denunciar un delito de sedición es "directa" de cada agente

El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha manifestado que la obligación de denunciar un posible delito de sedición es "directa" de cada agente "como policía judicial", en respuesta a la nota interna del jefe de Mossos, Josep Lluís Trapero, en la que centralizaba y asumía todas las responsabilidades de las investigaciones de la policía catalana.

A preguntas de los periodistas, sobre la explicación dada por el conseller en funciones de Interior de la Generalitat, Jordi Jané --que argumentó que la nota era para "aportar seguridad jurídica"--, ha señalado que "cualquier funcionario de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad tiene la obligación de notificar ante la Fiscalía o los jueces la hipotética comisión de un delito".

"Por tanto, no puede haber etapas intermedias", ha subrayado Catalá, quien ha apostillado que "la obligación es personal y directa" de cada agente "como policía judicial".

Por ello, ha dicho que "no hay obligación de informar a un superior". No obstante, ha apostillado que "si lo que se pretende desde la Consejería de Interior es una coordinación, habrá que estudiar administrativamente si tiene sentido".

El ministro de Justicia ha realizado estas manifestaciones antes de clausurar las V Jornadas Nacionales entre letrados de la Administración de Justicia y procuradores.