EEUU investiga una cómoda de Ikea que ha causado la muerte a tres niños
Un niño de 22 meses ha muerto en Estados Unidos por la caída de una cómoda de Ikea. Con este ya son tres los casos de accidentes mortales relacionados con este muebles, una cómoda de la línea MALM. En concreto, se trata del modelo de seis cajones, que no estaba atornillado a la pared.
Un niño de 22 meses ha muerto en Estados Unidos por la caída de una cómoda de Ikea. Con este ya son tres los casos de accidentes mortales relacionados con este muebles, una cómoda de la línea MALM. En concreto, se trata del modelo de seis cajones, que no estaba atornillado a la pared.
Según la web de la marca sueca, el armario mide 123 centímetros de alto por 48 de profundidad. Las instrucciones indican cómo se fija a la pared, aunque no señala con claridad que debe fijarse porque es una pieza que puede ser inestable.
El verano pasado, la comisión de defensa del consumidor de los Estados Unidos emitió una alerta de seguridad por el uso de cómodas y roperos de Ikea, después de que dos niños muriesen a consecuencia de las heridas provocadas por la caída de estos muebles.
Theodoro McGee estaba durmiendo la siesta en su casa de Minnesota. Pero sin que los padres se diesen cuenta, se levantó se agarró a la cómoda, que cedió y se le cayó encima. Los padres no se dieron cuenta del accidente en ese momento. Se lo encontraron muerto.
En España, la web de Ikea no tiene ninguna alerta que recuerde la recomendación de que estas cómodas deben ser fijadas a la pared. Sí las hay para diversos productos que la marca pide que sean devueltos por el riesgo que pueden entrañar para la seguridad de los usuarios. La última ha sido la base de lámpara ‘Gothem’, por riesgo de descarga eléctrica.
En un comunicado, el fabricante recuerda que recomienda que todas las cómodas sean fijadas a la pared usando el material apropiado que se incluye con el producto.
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