Un 'hat-trick' de Cristiano consolida el liderato blanco en el Calderón

El Real Madrid salió más líder del derbi de la capital tras derrotar al Atlético (0-3) con un 'hat-trick' de Cristiano Ronaldo, que marcó de falta, de penalti y a la contra, en lo que fue un sábado redondo para los jugadores de Zidane tras el traspié del Barça, que sirve para consolidar su condición de líder con cuatro puntos de renta sobre los culés y nueve sobre los colchoneros tras 12 jornadas de Liga.

Apenas hubo batalla en el último derbi liguero del Calderón. Un Atlético nervioso e incapaz se topó con la versión más aseada de los blancos, apoyados en un sobresaliente Isco, capitán general en el centro del campo, y en el acierto de Cristiano, que golpeó con puño de hierro para inscribir su nombre en esta fecha cargada de simbolismo para los rojiblancos.

Poco le hizo falta al Real Madrid para hacerse dueño del partido después de dos acercamientos locales. Con Carrasco bien atado y Griezmann desaparecido en combate, Isco se echó al equipo a su espalda para ejercer de líder. El malagueño dio un auténtico recital en los primeros 45 minutos, en sus botas nació todo el peligro de los merengues.

La efervescencia atlética se disipó bien pronto con otro lanzamiento de Modric y la presión alta del vecino. El conjunto de Zidane no tuvo reparos en redoblar esfuerzos, ayudado por la presencia de un trabajador Lucas Vázquez, y de un sensacional Kovacic que va a más según avanza la temporada. Sin la BBC el Madrid es más Madrid. Es mucho más equipo.

Los merengues calentaron el horno con un cabezazo de Cristiano a los 12 minutos que detuvo Oblak en la misma línea. La jugada llevó la firma de Isco, que nuevamente sacó el conejo de la chistera. El primer aviso no tuvo consecuencias en el marcador, pero sí la segunda intentona de los merengues. Una falta a 30 metros de distancia que se apropió Ronaldo como de costumbre.

El de Madeira, que llevaba seis derbis sin marcar, lo hizo este sábado con algo de fortuna en el primero de su triplete. El lanzamiento pegó en la barrera y desvió la trayectoria. Gabi y Savic hicieron un flaco favor a Oblak. El gol no pasará a la historia por su belleza, pero sí hizo justicia a la apuesta del actual campeón de Europa y a los nervios de su oponente. El Atleti demostró demasiada responsabilidad.

En la segunda mitad, el guion fue bien distinto. Los de Simeone buscaron más profundidad con la entrada de Correa y Gameiro, apretaron la salida del balón y achicaron espacios en defensa. Todo presagiaba el empate, sobre todo porque Griezmann empezaba a despertar y a hacer daño entre Nacho y Varane, la misma pareja que cayó goleada en aquel fatídico febrero de 2015. Hoy, la película fue bien distinta.

Sin embargo, no hubo manera de batir a Keylor Navas. El Atlético enhebraba mejor fútbol que su eterno rival, pero no terminó de encontrar la rendija que cambiase la cara al encuentro. Para colmo, en un balón aislado, Cristiano fue derribado en el área por Savic, que no acertó con el despeje, y Fernández Borbalán señaló penalti. El luso no falló y mató el partido.

No hubo recompensa para un Atleti que terminó claudicando a la pegada de los de Chamartín. Una contra de libro iniciada por Isco acabó en los pies de Bale, que le regaló una noche mágica a Cristiano con el tercero. El Real Madrid sentenció a su rival, se llevó el último derbi -no ganaba desde 2013- y se fue del Vicente Calderón con la sensación de haber agarrado un pedacito de Liga.