LeBron James encuentra pintadas racistas en la puerta principal de su casa

Un día antes de sus séptimas finales consecutivas de la NBA, la mente de LeBron James estaba de todo menos concentrada en el baloncesto y los Golden State Warriors.

El jugador solo quería estar con su familia en Ohio y hablar a sus hijos sobre racismo después de encontrar pintadas racistas en la puerta principal de su casa en Los Angeles.

El Departamento de Policía de Los Angeles investigaban ayer mientras James y sus Cavaliers se preparaban para el primer partido en Golden State. Casi un año después de que James comentara la influencia de Muhammad Ali tras la muerte del campeón de los pesos pesados, el alero explicaba el reto que supone ser negro en los Estados Unidos.

"No importa cuánto dinero tengas, no importa lo famoso que seas, no importa cuánta gente te admire, ser negro en America es duro", dijo James, visiblemente afectado. "Tenemos mucho que hacer como sociedad para que los afroamericanos nos sintamos en igualdad".

Un individuo no identificado pintó con spray la "N-word", palabra prohibida que hace referencia de forma despectiva al color de la piel de los afroamericanos, en la puerta principal de la casa de LeBron en el barrio de Brentwood. No había nadie en casa cuando sucedió.

El jefe de seguridad de la casa dijo a los agentes que el incidente podría haber sido grabado por las cámaras de vigilancia. La policía investiga si fue un acto de vandalismo o un crimen de odio. 

Es difícil para James pensar que no estará con su familia hasta la próxima semana, por lo que prefirió viajar antes que hacer una videollamada. "Es como que me está matando ahora mismo".